La Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla ha impuesto una sanción al propietario de un antiguo local comercial en la Macarena por haberlo reconvertido en un aparcamiento público sin la correspondiente licencia. El inmueble, con una superficie de 1.298,45 metros cuadrados y anteriormente destinado a la venta de muebles, había sido acondicionado como un garaje rotatorio sin autorización municipal.
El Ayuntamiento ha ordenado la paralización inmediata de esta actividad en el local, ubicado en la calle Muñoz León, frente a la Muralla de la Macarena y junto a un hotel de la zona. Además, se ha decretado la retirada de materiales y maquinaria vinculados a su funcionamiento, así como el precintado de las instalaciones en aplicación de la normativa urbanística vigente.
Posibles sanciones económicas
Urbanismo ha advertido que el incumplimiento de la orden de suspensión podrá derivar en multas coercitivas reiteradas, con importes que oscilarán entre 600 y 5.000 euros, dependiendo del valor de las obras ejecutadas. Además, si persiste la actividad irregular, el caso podría ser trasladado al Ministerio Fiscal para determinar posibles responsabilidades adicionales.
Asimismo, el expediente sancionador establece que la infracción podría ser considerada «muy grave», con una penalización de hasta 120.000 euros, según lo estipulado en la legislación urbanística autonómica.
Medidas de reposición y plazos
El afectado dispone de un plazo de dos meses para regularizar la situación solicitando la licencia pertinente o, en su defecto, devolver el inmueble a su estado original. Para ello, deberá proceder a: Desmontar las barreras de control y los dispositivos de identificación y cobro, eliminar la señalización de plazas de aparcamiento y recorridos de vehículos en la planta baja, retirar cualquier elemento distintivo del aparcamiento en el interior del edificio. El plazo para iniciar estas actuaciones es de 20 días, con una ejecución estimada de 15 días adicionales.
Por otro lado, el Ayuntamiento ha solicitado a las compañías de suministros que suspendan en un máximo de cinco días los servicios proporcionados al inmueble. De no cumplir con esta orden, estas empresas también podrían enfrentarse a sanciones económicas.
Incumplimientos urbanísticos
El expediente detalla que la actividad implantada en el local no se ajusta a las condiciones establecidas en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Sevilla. Según la normativa, el uso de garaje-aparcamiento público en este tipo de edificaciones solo está permitido en sótanos o en determinadas condiciones que no se cumplen en este caso. Además, la habilitación de plazas en espacios libres de parcela vulnera las disposiciones del PGOU, que establece que estas zonas deben destinarse exclusivamente a áreas libres al servicio de la edificación.
Por último, Urbanismo ha abierto un expediente independiente para revisar la publicidad instalada en la fachada del inmueble. Con este procedimiento, el Ayuntamiento de Sevilla busca restablecer la legalidad urbanística y evitar el uso indebido de locales comerciales para fines no autorizados, asegurando el cumplimiento de la normativa vigente en la ciudad.