
Vecinos de Matalascañas plantan cara a la zona azul: 'No somos turistas'
Protesta en Matalascañas: “No somos veraneantes”

Este viernes a las 11:00 de la mañana, vecinos y propietarios de Matalascañas, muchos de ellos de Sevilla con segunda residencia en la localidad onubense, se han concentrarán en la primera rotonda de la carretera norte para protestar contra la implantación de la zona azul en toda la urbanización costera.
La convocatoria, organizada por la Asociación de Propietarios de Matalascañas, responde al malestar creciente entre los vecinos, que acusan al Ayuntamiento de Almonte de "imponer sin diálogo" un modelo de ordenación del tráfico que consideran injusto y discriminatorio.
“Nos tratan como veraneantes, cuando somos parte esencial del tejido económico de Almonte”, han declarado desde la asociación, que afirma haber solicitado sin éxito hasta seis reuniones con el alcalde, Francisco Bella, para abordar no solo la cuestión del estacionamiento regulado, sino también lo que consideran un abandono generalizado de la urbanización, incluyendo el deterioro del Paseo Marítimo.
Según explican los manifestantes, aparcar en Matalascañas durante los meses de verano puede llegar a costar hasta 95 euros a la semana debido a las tarifas de la zona ORA, una situación que, aseguran, “no se da en ningún otro núcleo turístico de España”.
La protesta busca visibilizar lo que consideran una doble injusticia: ser considerados turistas cuando en realidad contribuyen —según sus cifras— con más del 65% del presupuesto municipal de Almonte.
"Situación caótica e inaceptable" en Matalascañas
“La situación es caótica, no hay inversiones, no hay mantenimiento, y ahora nos imponen un sistema de cobro que solo agrava el problema”, denuncian. La asociación insiste en que la implantación de la zona azul no ha ido acompañada de mejoras en infraestructuras ni servicios, y consideran que esta medida solo busca recaudar a costa de quienes ya sostienen gran parte del municipio.
Además, han anunciado que no se trata de una acción aislada. “Seguiremos movilizándonos hasta que el Ayuntamiento retire esta medida. Muy pronto pediremos nueva autorización para manifestarnos también en defensa del Ciclo Integral del Agua”, han adelantado.
Los propietarios denuncian que pagan el agua más cara pese a que, según sus datos, el coste de producción del servicio en la zona es de los más bajos.
Con la temporada alta en pleno auge, la tensión entre los propietarios y el Ayuntamiento amenaza con intensificarse si no se abre una vía de diálogo. Por ahora, la administración local no ha respondido públicamente a las demandas de los vecinos.