Entran las nuevas Ordenanzas fiscales de Sevilla con la bajada del 1% en los impuestos y congelación de las tasas

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Agencia Tributaria de Sevilla.
Oficina tributaria de Sevilla.

Las nuevas ordenanzas fiscales del Ayuntamiento de Sevilla, aprobadas el pasado 2 de noviembre, han entrado en vigor este jueves. Las ordenanzas suponen una bajada del 1% en los impuestos locales y una congelación real de las tasas.

Los impuestos que se reducen son el IBI, el impuesto de vehículos de tracción mecánica, la llamada plusvalía, el IAE y el ICIO. La tasa que se crea es la de bodas en el Ayuntamiento, que tendrá un coste de 116 euros.

Bajada de impuestos

El Ayuntamiento de Sevilla justifica esta bajada de impuestos en la necesidad de «aliviar la presión fiscal» sobre los ciudadanos. Sin embargo, el PSOE, que votó a favor de las ordenanzas, considera que la bajada no es suficiente y que debería ser más progresiva.

Además de la bajada de impuestos, las nuevas ordenanzas fiscales también incluyen una modificación de los precios públicos del Alcázar. A partir de ahora, las entradas que se vendan en taquilla y por Internet tendrán el mismo precio.

Con esta medida, el Ayuntamiento de Sevilla pretende incentivar el uso de la compra online y evitar las imágenes de las colas en el Alcázar.

¿Cuáles son las ciudades de España con impuestos más altos?

Según un estudio de la consultora KPMG, las ciudades de España con los impuestos más altos son las siguientes: Barcelona, San Sebastián, Ibiza, Madrid, Palma de Mallorca, Valencia, Sevilla y Zaragoza.

Estos municipios tienen impuestos más altos que la media nacional en todos los ámbitos, incluidos los impuestos locales, como el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) y el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE), así como los impuestos estatales, como el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y el Impuesto sobre Sociedades (IS).

Hay varias razones por las que estas ciudades tienen impuestos más altos. Una razón es que son ciudades turísticas populares, y los impuestos se utilizan para financiar los servicios públicos y las infraestructuras que atraen a los turistas. Otra razón es que estas ciudades son centros económicos importantes, y los impuestos se utilizan para financiar las empresas y los servicios que generan empleo y riqueza.

Los impuestos más altos pueden ser un factor disuasorio para las empresas y las personas que buscan establecerse en estas ciudades. Sin embargo, también pueden ser una señal de que estas ciudades son vibrantes y prósperas, y que ofrecen una buena calidad de vida.