Andalucía ha registrado un total de 79 casos de sarampión en lo que va de 2025, tras confirmarse esta semana dos nuevas infecciones en la provincia de Almería. La Consejería de Salud ha intensificado las medidas de prevención y ha instado a la población a revisar su historial vacunal, especialmente en contextos de brote como el actual.
Los dos últimos contagios corresponden a un hombre de 33 años en Vera, sin conexión aparente con otros pacientes de la zona, y a una niña de un año en Huércal-Overa que contaba con una dosis de la vacuna triple vírica. Aunque las autoridades aseguran que la situación “no es preocupante”, sí alertan de la necesidad de actuar con responsabilidad para evitar una propagación mayor.
Entre las medidas adoptadas se encuentra el adelanto de la segunda dosis de la vacuna a los 15 meses, así como campañas dirigidas a adultos que no hayan sido inmunizados o desconozcan su estado vacunal. Además, se está realizando una búsqueda activa de personas en situación de vulnerabilidad, que por distintas razones no han recibido la vacuna.
Casos importados y dispersión geográfica
Un 24% de los casos detectados en Andalucía han sido importados, procedentes en su mayoría de Marruecos (17 casos), pero también de Bélgica y Dinamarca. El resto se consideran casos autóctonos o de origen desconocido, con una distribución dispersa que incluye municipios como Málaga, Marbella, Huelva, Granada y varias localidades de Almería.
Esta dispersión geográfica dificulta el rastreo del virus, y muestra un patrón de transmisión comunitaria que preocupa a los expertos sanitarios. De los 79 casos, el 32% ha requerido hospitalización, lo que refleja no solo el impacto clínico, sino también la presión que puede ejercer sobre el sistema sanitario.
Perfil de los afectados: mayoría no vacunados
La mayoría de los pacientes no estaban vacunados o no se dispone de información fiable sobre su historial de inmunización. Solo tres personas contaban con una dosis documentada de la vacuna. El 67% de los casos corresponde a adultos entre 15 y 70 años, y el 33% a menores de edad. Ocho de los afectados son bebés menores de un año, edad en la que todavía no se administra la segunda dosis de la vacuna.
Entre los no vacunados figuran menores procedentes de Marruecos y Rusia, lo que pone de manifiesto las brechas en la cobertura vacunal entre la población migrante, un reto adicional para la salud pública.
Brotes activos y vigilancia intensificada
En lo que va de año se han declarado 13 brotes de sarampión en Andalucía, de los cuales siete siguen activos. Las autoridades sanitarias mantienen una vigilancia constante y han reforzado las campañas informativas en centros de salud y medios de comunicación, con el objetivo de incrementar la cobertura vacunal y contener los focos existentes.
La Consejería de Salud insiste en que la vacunación es la herramienta más eficaz para evitar nuevas infecciones. La triple vírica, que protege contra el sarampión, las paperas y la rubéola, es gratuita y forma parte del calendario vacunal infantil, aunque también está disponible para adultos no inmunizados.
Las autoridades hacen un llamamiento a la responsabilidad ciudadana. “La colaboración de la población es fundamental. Vacunarse no solo protege a quien recibe la vacuna, sino también a quienes no pueden inmunizarse por motivos de salud”, ha subrayado un portavoz de la Consejería.