
Cómo pudo llegar la gripe aviar a Sevilla y qué riesgos existen para la población
Alarma en Sevilla por la gripe aviar: mueren patos y gansos en parques urbanos

La tranquilidad de los parques de Sevilla se ha visto alterada en las últimas semanas por un fenómeno inusual: la muerte repentina de varios patos y gansos que habitaban en lagunas y estanques urbanos.
Las primeras necropsias realizadas a las aves han confirmado la presencia de gripe aviar, una enfermedad infecciosa que, aunque afecta principalmente a especies silvestres y de corral, despierta preocupación por su potencial salto a los seres humanos.
Los expertos señalan a que el virus podría haber llegado a Sevilla a través de alguna de las aves migratorias que cruzan la península ibérica en su camino entre África y Europa. Estas especies, que suelen detenerse en humedales o parques urbanos, pueden actuar como portadoras silenciosas del virus.
Un solo ejemplar infectado basta, sería suficiente, para propagar la enfermedad a otras aves acuáticas locales.
En los últimos años, la gripe aviar se ha expandido con mayor facilidad debido al cambio climático y las alteraciones en las rutas migratorias. Este fenómeno ha propiciado que aves portadoras hagan escalas en lugares que antes no formaban parte de su recorrido, aumentando el riesgo de contagio en espacios urbanos.
Medidas urgentes en Sevilla contra la gripe aviar
Las autoridades municipales, en coordinación con la Junta de Andalucía, han activado un protocolo de emergencia. Entre las primeras medidas cabe destacar:
Retirada de aves muertas o enfermas de parques y estanques para evitar posibles nuevos contagios.
Cierre temporal de lagunas y parques así accesos cercanos a zonas donde se han detectado focos.
Control veterinario intensivo para detectar síntomas en aves de corral en todas las inmediaciones de la ciudad.
Campañas informativas dirigidas a la población para advertir sobre la importancia de no tocar ni alimentar a aves enfermas.
Además, se han tomado muestras en diferentes puntos para rastrear la posible extensión del virus. El objetivo es contener el brote antes de que afecte a un número mayor de animales y se convierta en una amenaza para la biodiversidad urbana.
¿Existe riesgo para las personas de contagio por la gripe aviar?
La gripe aviar en humanos es un fenómeno poco frecuente, pero no imposible. El contagio suele producirse tras un contacto directo y prolongado con aves infectadas, sus plumas o excrementos.
Por el momento, los casos detectados en el mundo han sido excepcionales y se han dado principalmente en entornos rurales, en contacto con aves de corral.
En Sevilla, las autoridades sanitarias recalcan que el riesgo para la población es bajo.
Aun así, recomiendan extremar la precaución en los parques: no acercarse a animales muertos, avisar de inmediato a los servicios municipales en caso de encontrarlos y evitar el contacto de mascotas con aves acuáticas.
Especialistas recuerdan que el virus no se transmite por el aire como la gripe común, sino a través del contacto directo. Por tanto, pasear por los parques no representa peligro siempre que se respeten las medidas de seguridad.
Acabar con la gripe aviar en entornos urbanos supone un problema. No existe un tratamiento específico para las aves silvestres, por lo que las actuaciones se centran en la contención del brote y la vigilancia continua.
Paralelamente se evalúa reforzar la bioseguridad en granjas avícolas cercanas, ya que un salto del virus a explotaciones de cría tendría un fuerte impacto económico.
La provincia de Sevilla, ciudad atravesada cada año por importantes rutas migratorias, seguirá bajo observación en los próximos meses. La coordinación entre administraciones y la colaboración ciudadana serán claves para evitar que la enfermedad se expanda.