
Comerciantes denuncian el abandono y suciedad de las calles históricas en Sevilla
Comerciantes y hosteleros del centro de Sevilla reclaman más limpieza: «Las máquinas llevaban meses sin pasar»

Calles con valor patrimonial, pero con una imagen muy deteriorada. Así describen los comerciantes y hosteleros la situación de las calles Jovellanos y General Polavieja, en pleno corazón de Sevilla, donde la suciedad acumulada en los últimos meses ha generado una oleada de protestas. Acusan a la empresa municipal de limpieza, Lipasam, de haber reducido la frecuencia de su actuación en la zona, mientras que el Ayuntamiento admite deficiencias puntuales y responde con una intervención de urgencia tras recibir varias quejas.
“Las máquinas llevaban meses sin pasar”, dicen los afectados, que aseguran que la limpieza nocturna con maquinaria especializada desapareció de su rutina diaria. Entre las muchas manchas oscuras en el pavimento, olores persistentes y contenedores expuestos fuera del horario establecido, el malestar aumenta en una zona por la que transitan miles de turistas cada día.
Además del estado del pavimento, los comerciantes señalan que el entorno se ha vuelto incómodo tanto para vecinos como para turistas. Entre los contenedores, bloques de hormigón y toldos mal dispuestos, algunos describen la Avenida como “una gymkana de obstáculos”.
“Los camiones de recogida dejan residuos líquidos y no siempre se limpian. Los turistas ven los cubos fuera de hora y empiezan a dejar basura. Es una pena que una calle tan visitada esté así” dice unos de los comerciantes de este entorno.
“El suelo está negro y huele a químico. Antes las máquinas pasaban por la noche. Pedimos que vuelvan” reclama otro.
El papel de los negocios en el centro de Sevilla
Las ordenanzas municipales de Sevilla obligan a los establecimientos a mantener en buen estado de limpieza sus terrazas, así como a sacar y recoger los contenedores en horarios concretos, sin obstaculizar el paso. Sin embargo, el incumplimiento por parte de algunos negocios también contribuye al problema.
Varias imágenes tomadas en los últimos días muestran contenedores aún en la vía pública después de las 10:00, fuera del horario permitido, y residuos acumulados junto a las fachadas. Según la normativa vigente, estos comportamientos suponen infracciones que pueden agravar la percepción de abandono en la zona.
Consultado por este medio, el Ayuntamiento de Sevilla reconoce que algunas manchas en el pavimento pueden deberse al paso de los camiones de residuos, aunque también apuntan al tráfico de reparto y otros vehículos pesados. Desde el consistorio aseguran que las calles se baldean a diario y que se utilizan máquinas específicas para limpiar la suciedad más incrustada.
No obstante, admiten haber recibido dos solicitudes de refuerzo del baldeo: una el 27 de mayo y otra el 7 de julio. Finalmente, el pasado viernes 10 de julio, se llevó a cabo una limpieza de urgencia en ambas calles.
A pesar de la actuación, los comerciantes insisten en que se trata de una solución puntual y reclaman una revisión del sistema actual de recogida de basura, así como una mayor regularidad en las limpiezas profundas. Proponen, entre otras medidas, evitar que estas vías estrechas y turísticas se utilicen como puntos de vaciado centralizado, dada la presión que soportan a diario.
El conflicto sigue abierto y mientras los negocios se esfuerzan por mantener su entorno, piden al Ayuntamiento que dé un paso más allá del mantenimiento básico y proteja el valor histórico y turístico del centro sevillano.