Este viernes, 30 de mayo, la Catedral de Sevilla volverá a abrir al público la urna de San Fernando, patrón de la ciudad, en el marco de su festividad litúrgica. La apertura, que solo se realiza en contadas ocasiones al año, permitirá a los fieles venerar los restos del rey santo, que descansan desde hace casi ocho siglos en la Capilla Real.
El acceso estará habilitado desde las 8:30 hasta las 13:00 horas. A las 9:30 se celebrará una solemne Misa Coral, presidida por el deán de la Catedral y concelebrada por los capellanes reales, con la asistencia de la Corporación municipal. A las 12:00 tendrá lugar la Eucaristía en honor al patrón del Arma de Ingenieros, también en la Capilla Real.
Una tradición con siglos de historia y San Fernando
La apertura de la urna se celebra dos veces cada mes de mayo: una con motivo del aniversario del traslado de los restos de San Fernando desde el Real Alcázar a la Catedral en 1729, que se conmemoró este año el pasado 14 de mayo; y otra, coincidiendo con el aniversario de su muerte, el 30 de mayo de 1252, día también de su festividad litúrgica.
Los actos en honor al rey santo incluyen un triduo celebrado del 24 al 26 de mayo y una disertación conmemorativa que tuvo lugar la víspera, el jueves 29, en la Capilla Real. Cada jornada del triduo ha sido presidida por un párroco de alguna de las parroquias fundadas por el propio San Fernando, acompañado por su consejo pastoral y feligreses.
Además de en mayo, la urna suele abrirse en agosto, durante las celebraciones de la Virgen de los Reyes, patrona de Sevilla, y el 23 de noviembre, fecha en la que se conmemora la festividad de San Clemente y la reconquista de la ciudad por el rey castellano-leonés.
El cuerpo incorrupto del rey Fernando III «el Santo»
El cuerpo de San Fernando reposa en una urna relicario de plata de estilo hiperbarroco, obra del orfebre Juan Laureano de Pina. Este relicario se encuentra en un estado de conservación «excepcional», y los últimos estudios médico-forenses concluyen que el cuerpo no presenta daños significativos ni signos de deterioro biológico: no se han detectado ácaros, hongos ni bacterias relevantes. La urna, fabricada en plata, actúa además como un bactericida natural que ha contribuido a preservar los restos.
Los análisis más recientes revelan que el santo rey medía 1,70 metros y su rostro coincide notablemente con las representaciones pictóricas hechas por Murillo. En la urna puede leerse también un epitafio escrito por su hijo, Alfonso X el Sabio.
Este fenómeno de conservación ha sido considerado por muchos como un milagro. La “Caja Negra”, como es conocida popularmente la urna, se convierte en estos días en un punto de profunda devoción y orgullo para los sevillanos, quienes cada año rinden homenaje al monarca que reconquistó la ciudad en 1248 y la consagró a la Virgen de los Reyes.
Coincidencia con la Selectividad
Curiosamente, esta jornada de especial importancia religiosa y patrimonial coincide con otra cita clave para miles de jóvenes sevillanos: casi 13.000 estudiantes se presentarán a partir del martes a la nueva Selectividad, lo que marca también un momento decisivo para el futuro académico de la juventud local.
La apertura de la urna de San Fernando y la celebración de sus cultos litúrgicos ofrecen así un contraste entre la historia sagrada y la actualidad educativa, reflejando la riqueza cultural y espiritual de Sevilla.
