El Estadio de La Cartuja, una de las infraestructuras más emblemáticas pero a menudo desoladas de Sevilla, se convirtió este martes en el escenario de un trágico suceso. Una mujer de 63 años, funcionaria de la Junta de Andalucía, fue encontrada sin vida en su interior tras haber sido declarada como desaparecida desde el día anterior por sus familiares. Según fuentes cercanas, la fallecida estaba vinculada a la Secretaría General para el Deporte, lo que ha generado aún más interrogantes sobre las circunstancias de su muerte.
El hallazgo se produjo alrededor de las 15:10 horas, cuando un ciudadano alertó a emergencias tras encontrar a la mujer inconsciente en la puerta número 16 del estadio. De inmediato, se movilizaron efectivos de la Policía Local, la Policía Nacional y el Centro de Emergencias Sanitarias (CES) 061. Los servicios sanitarios confirmaron su fallecimiento al llegar al lugar.
Un estadio con poco uso deportivo
El Estadio de La Cartuja, aunque construido para grandes eventos deportivos y culturales, permanece la mayor parte del tiempo en desuso, lo que lo convierte en un lugar frecuentemente solitario y apartado -excepto cuando hay concierto-. Este contexto ha generado especulaciones sobre cómo la funcionaria llegó allí y si su muerte está relacionada con alguna actividad profesional o personal. Las circunstancias de su fallecimiento no han sido aclaradas y se descarta, por el momento, que estuviera participando en algún evento programado en el recinto.
Agentes de la Policía Científica acudieron al estadio para realizar una inspección ocular y recabar pruebas que ayuden a esclarecer los hechos. Según fuentes policiales, no se descartan hipótesis, incluidas causas naturales, un posible accidente o incluso la implicación de terceras personas. No obstante, hasta el momento no se han divulgado detalles concluyentes que permitan arrojar luz sobre lo ocurrido.
El estadio, ubicado en la Isla de la Cartuja, es conocido por su localización apartada y poco transitada cuando no hay eventos de gran envergadura. Su entorno, con amplias zonas de escaso tráfico peatonal y limitado acceso en días normales, complica la posibilidad de que el fallecimiento de la mujer fuera advertido antes de que se diera la alerta.
El caso ha generado una profunda conmoción entre los trabajadores de la Junta de Andalucía y en el ámbito sevillano, al tiempo que se mantiene la expectación por los resultados de la investigación. Mientras tanto, el recinto sigue cerrado al público, a la espera de que las autoridades concluyan las diligencias pertinentes.