En la historia de la ufología, pocos casos han generado tanto impacto y pánico como el de Adrián Sánchez. Este viajante sevillano vivió una experiencia aterradora el 14 de abril de 1974, un suceso que lo convirtió en protagonista de titulares nacionales y escribió una de las páginas más inquietantes de la ufología mundial.
Todo comenzó cuando Adrián se dirigía en coche desde Aznalcázar a Nerva. De pronto, observó un objeto cayendo en picado, confundiéndolo con un avión. Al detenerse para investigar, se topó con una escena que jamás olvidaría: una enorme nave de color aluminio, de unos 200 metros de longitud, flotando en el aire antes de posarse en el suelo.
El terror se apodera de Adrián
Aterrorizado, Adrián observó cómo dos objetos discoidales se introducían en la nave nodriza, mientras que un tercero se dirigía directamente hacia él. Sin pensarlo dos veces, puso en marcha su coche y huyó a toda velocidad, perseguido por el misterioso objeto volador.
Un relato que conmocionó a España
Tras la aterradora experiencia, Adrián no dudó en denunciar lo sucedido ante la Guardia Civil, tanto en El Castillo de las Guardas como en la Comandancia de Sevilla. Su relato conmocionó a España y se convirtió en noticia de primera plana en los medios nacionales.
A pesar de las investigaciones y los intentos por encontrar una explicación racional al avistamiento, el caso de Adrián Sánchez sigue siendo un misterio sin resolver. Décadas después, su testimonio continúa siendo una referencia obligada en la ufología, un recordatorio de que los fenómenos inexplicables aún forman parte de nuestro mundo.
El terrorífico viaje de Adrián Sánchez
La impactante historia de Adrián Sánchez, un viajante sevillano que asegura haber sido perseguido por un ovni, continúa generando escalofríos. Tras el aterrador avistamiento inicial, su relato toma un giro aún más dramático:
De repente, aparecen tres naves más pequeñas con forma de hongo. Dos de ellas se introducen en la nave nodriza, mientras que la tercera detecta la presencia de Adrián a unos 25 o 30 metros y comienza a maniobrar como si fuera a perseguirlo.
Lleno de horror, Adrián regresa a su coche, que había dejado con el motor en marcha, y emprende una veloz huida hacia El Castillo de las Guardas, a unos 5 kilómetros de distancia. Pero la persecución continúa.
Adrián observa cómo uno de los objetos aparece y desaparece cerca de los costados del coche. El ovni, sin ventanas y silencioso, muestra torretas en la parte superior e inferior.
Testimonios y dibujos para respaldar la historia
Al llegar a El Castillo de las Guardas, Adrián relata su experiencia al dueño de una finca, quien lo acompaña a la Guardia Civil. Allí, narra su historia con detalle e incluso dibuja lo que ha visto. Su terror es tal que rechaza viajar a Sevilla sin compañía, por lo que el sargento comandante del puesto se ofrece a acompañarlo.
Técnicos de aviación e ingenieros se personan en el lugar donde Adrián asegura haber visto los ovnis para buscar pruebas que corroboren su testimonio.
La historia de Adrián Sánchez se convierte en noticia nacional, generando gran impacto en la sociedad. Su relato, lleno de detalles y respaldado por testigos y dibujos, alimenta el debate sobre la existencia de ovnis y deja un interrogante sin resolver: ¿qué vio realmente Adrián Sánchez en aquella noche de 1974?
*Más información en «OVNIs en Sevilla», Ed. Niebla, Jose Manuel García Bautista.