Un hallazgo fortuito durante las obras de un hotel en la céntrica calle San José ha sacado a la luz un vestigio de incalculable valor histórico: un imponente muro romano. Este descubrimiento, calificado por los expertos como «sorprendente», aporta nuevas e inesperadas piezas al rompecabezas de la Sevilla romana, una ciudad que aún guarda muchos secretos bajo tierra.
Hasta ahora, no se habían encontrado evidencias de la muralla romana en esta zona, que se situaría fuera del recinto amurallado de la ciudad. El muro, de mampostería, se erige como cimiento de un edificio público de gran relevancia, según apuntan las primeras investigaciones.
Este hallazgo pone de manifiesto que la Sevilla romana sigue siendo un enigma para los historiadores y arqueólogos. Las huellas de Hispalis solo salen a la luz de forma intermitente durante obras puntuales, por lo que este muro se considera un hito que merece un estudio exhaustivo, incluso si finalmente se decide que permanezca oculto bajo la nueva construcción.
El muro, de unos tres metros de altura, dos metros de profundidad y casi metro y medio de ancho, presenta una construcción irregular de mampostería y corta otros cimientos de ladrillo. Su orientación este-oeste y la longitud documentada hasta el momento es de unos cinco metros.
Un enigma romano en el corazón de Sevilla
Un inesperado hallazgo durante las obras de un hotel en la céntrica calle San José ha abierto un nuevo capítulo en la historia de Sevilla. Se trata de un muro de época romana, ubicado en un solar junto a la iglesia del Señor San José y a la espalda del Hotel Fernando III, que ha sorprendido a los expertos por su ubicación, completamente inédita para este tipo de estructuras.
El muro, de características aún desconocidas, se encuentra en un lugar que hasta ahora no había revelado indicios de presencia romana. Su funcionalidad y cronología aún no han podido determinarse, lo que ha despertado un gran interés en la comunidad arqueológica.
Los expertos esperan que la delegación provincial de Cultura autorice un estudio exhaustivo del hallazgo. A pesar de que el hotel proyectado en el solar no cuenta con sótano y no afectaría a los restos, se considera que la importancia del descubrimiento justifica una investigación profunda, incluso si posteriormente se decide cubrirlo.
La naturaleza del muro, sin duda, apunta a un edificio público de gran relevancia. Su tamaño y características lo asemejan a estructuras similares encontradas en la cercana Itálica, pero no se han encontrado paralelos en la propia Sevilla.
¿Posible parte del teatro romano de Híspalis?
Un artículo publicado en 1998 por el profesor de la Universidad de Sevilla Salvador Ordóñez situaba el teatro romano de Hispalis en las inmediaciones de la iglesia del convento de Madre de Dios de la Piedad, a escasos metros del solar, tal y como indica el compañero Juan Parejo en Diario de Sevilla. Aunque esta hipótesis se basaba en una inscripción hallada durante las obras de restauración de la iglesia, el reciente descubrimiento no permite confirmar ni descartar esta teoría.
Sin duda, este hallazgo abre un sinfín de preguntas sobre la Sevilla romana y su urbanismo. Se espera que en los próximos meses se amplíen los estudios para desentrañar los secretos que guarda este enigmático muro, un tesoro histórico que nos recuerda el rico pasado de una ciudad milenaria.