Prueba de prevención del cáncer de mama.
Mamografía realizada en un hospital.

Una sola visita al hospital: el nuevo protocolo andaluz que acelera el diagnóstico del cáncer de mama

Andalucía implanta el “acto único” para agilizar el diagnóstico del cáncer de mama

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La Junta de Andalucía ha dado un paso decisivo en la gestión del cribado de cáncer de mama tras la crisis provocada por los fallos detectados en miles de mamografías.

El consejero de Sanidad, Presidencia y Emergencias, Antonio Sanz, ha confirmado la firma de la orden que activa el denominado “acto único” para mujeres con resultados radiológicos sospechosos, clasificados como Birads 4 o 5, tanto en pruebas de cribado como diagnósticas.

La medida entrará en vigor el 12 de enero, aunque los centros sanitarios andaluces tendrán de plazo hasta el 28 de febrero para implementarla plenamente.

Su aplicación supondrá un cambio profundo en la atención a las pacientes, ya que permitirá realizar en un solo día todas las pruebas complementarias necesarias para confirmar o descartar un diagnóstico de cáncer: mamografía complementaria, ecografía mamaria y biopsia percutánea con aguja gruesa.

Hasta ahora, las mujeres con resultados sospechosos debían acudir al hospital en varias ocasiones, lo que podía prolongar la espera y generar mayor ansiedad. Con el nuevo sistema, el proceso se concentrará en una única jornada, eliminando desplazamientos y reduciendo de manera notable los tiempos de respuesta.

“Todas las unidades tendrán que cumplir esta orden para que las pruebas se activen y se realicen inmediatamente, en un único acto, evitando esperas y desplazamientos innecesarios”, señaló Antonio Sanz, quien recordó que esta medida fue un compromiso expreso del presidente Juanma Moreno en el último Debate sobre el Estado de la Comunidad.

Una medida tras la crisis de los cribados en Andalucía

El “acto único” forma parte del plan de choque que la Junta puso en marcha tras detectarse irregularidades en el programa de detección precoz del cáncer de mama, un problema que afectó a miles de mujeres y obligó a revisar más de 2.300 mamografías.

Desde ese momento la administración autonómica trabaja en una reforma integral del sistema de cribado con la participación de técnicos, profesionales sanitarios y asociaciones de pacientes.

Estas comisiones de seguimiento están evaluando las nuevas propuestas para garantizar un modelo más ágil, seguro y homogéneo en toda la comunidad.

Según explicó el consejero, el objetivo es avanzar hacia la “homogeneización” de los procedimientos entre hospitales y áreas de salud, de modo que todas las pacientes reciban el mismo protocolo de atención, independientemente de su lugar de residencia.

Entre las mejoras previstas destacan la unificación de historiales clínicos, la mejora de la trazabilidad de los casos, la reducción de retrasos en la lectura de mamografías y la creación de un sistema de alertas tempranas que permita anticiparse a la acumulación de pruebas o demoras.

“Humanizar” la comunicación con las pacientes

Más allá de los cambios técnicos, la Junta también ha decidido revisar el modo en que se comunica con las mujeres afectadas. Según Sanz, se está trabajando para “humanizar” el lenguaje de las cartas, mensajes y notificaciones digitales, eliminando tecnicismos innecesarios que pueden generar confusión o miedo.

“Hay que contar las cosas bien. Hemos querido convertir un problema en una oportunidad para mejorar el sistema, y que las principales beneficiadas sean las mujeres”, afirmó el consejero.

Esta revisión busca reforzar la confianza de las pacientes en el programa de detección precoz, después de un episodio que ha puesto en entredicho la fiabilidad del sistema. La transparencia, la rapidez en la atención y la sensibilidad en la comunicación son ahora los tres ejes sobre los que se asienta la nueva estrategia sanitaria andaluza.

Con la entrada en vigor del acto único, la Junta de Andalucía aspira a garantizar una respuesta diagnóstica más rápida, homogénea y segura para todas las mujeres con un hallazgo sospechoso de cáncer de mama.

“El objetivo es doble”, finalizó Sanz. “Por un lado, evitar que un episodio como el ocurrido pueda repetirse, y por otro, reforzar la calidad del programa de cribado en toda Andalucía.”