La violencia contra el personal sanitario ha vuelto a sacudir Sevilla. Este jueves, poco antes de las diez de la mañana, una grave amenaza se produjo en el centro de salud de Isla Mayor, donde un médico de familia fue intimidado con un cuchillo por una paciente que, además, aseguró que en una próxima ocasión acudiría armada con una pistola.
El Sindicato Médico de Sevilla (SMA-Sevilla) denunció públicamente el suceso a través de un comunicado en el que relató los momentos de tensión vividos en el centro sanitario. Según explicaron, los hechos comenzaron alrededor de las 9:30 horas, cuando una mujer se presentó en las instalaciones exigiendo ser atendida de inmediato, pese a no disponer de cita previa. El personal de admisión le ofreció ser valorada por el médico de guardia, siguiendo el protocolo habitual en estos casos. Sin embargo, la paciente reaccionó de manera agresiva, alzando la voz y mostrando una actitud cada vez más hostil.
La situación se agravó cuando varios profesionales intentaron calmarla sin éxito. La mujer consiguió finalmente acceder a la consulta de un médico de familia, donde su comportamiento se volvió aún más violento: comenzó a gritar e insultar tanto al facultativo como al resto del personal sanitario presente. En un momento crítico, la agresora sacó de su bolso un cuchillo de grandes dimensiones y se abalanzó en actitud amenazante hacia el médico, profiriendo palabras escalofriantes: «Te voy a matar».
Alarma generalizada
El ambiente de alarma entre los profesionales fue inmediato. Con sangre fría, el equipo sanitario logró persuadir a la mujer para que guardara de nuevo el cuchillo, tras lo cual procedieron a retener su bolso para impedir que volviera a sacar el arma. Posteriormente, consiguieron expulsarla de la consulta, aunque la amenaza no terminó ahí.
Ya en la sala de espera, visiblemente alterada y aún sin abandonar su actitud amenazante, la mujer lanzó nuevas amenazas de muerte. «La próxima vez voy a traer una pistola y te voy a pegar un tiro», aseguró en voz alta, añadiendo que «dispararía desde la primera hasta la última consulta».
La gravedad de las amenazas motivó la intervención inmediata de la Policía Local de Isla Mayor, que se desplazó hasta el centro de salud, acompañada de una patrulla de la Guardia Civil. Tras identificarla, los agentes procedieron a su detención. El médico agredido presentó la correspondiente denuncia por las amenazas sufridas.
Desde el Sindicato Médico de Sevilla han manifestado su profunda indignación por estos hechos, calificándolos como «intolerables» y «deleznables». En su comunicado, reclamaron de nuevo a las autoridades competentes la adopción urgente de medidas efectivas para proteger a los profesionales sanitarios, que, como han recordado, siguen enfrentándose a diario a situaciones de violencia física y verbal en su entorno laboral.
La seguridad de los trabajadores
«Cada agresión que se produce no solo pone en peligro la integridad de los trabajadores, sino que también afecta gravemente a la calidad asistencial que reciben los pacientes», señalaron desde el sindicato, insistiendo en que la violencia en los centros de salud constituye una auténtica lacra que debe ser erradicada con determinación.
El sindicato también animó a los profesionales a no dejar pasar por alto ningún tipo de agresión o amenaza, y a denunciar todos los incidentes ante las autoridades, como única vía para visibilizar el problema y exigir una respuesta contundente.
Este nuevo episodio de violencia pone de relieve un problema que va en aumento: Sevilla continúa siendo la provincia española con mayor número de agresiones registradas contra personal sanitario, una tendencia alarmante que, pese a las campañas de sensibilización y los protocolos de actuación vigentes, no ha logrado revertirse.
Mientras tanto, el médico agredido y sus compañeros siguen prestando servicio en un ambiente cargado de preocupación y temor, pero también de compromiso con sus pacientes, a la espera de que hechos como el ocurrido en Isla Mayor no queden impunes.