Inundación en la SE-20.
Carretera SE-20 tras las intensas lluvias.

Solo un tramo sigue cortado: así queda la SE-20 después de los graves daños por las lluvias

La SE-20 reabre casi por completo tras los graves daños provocados por la borrasca Claudia en Sevilla

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La circulación en la SE-20 recupera de forma progresiva la normalidad después de que la borrasca Claudia dejara importantes daños en esta vía de circunvalación y generara 380 incidencias en distintos puntos de la provincia de Sevilla.

Los servicios de emergencia han confirmado que la mayor parte del trazado vuelve a estar operativo, salvo un tramo que continúa cortado entre la A-4 y la Carretera de Miraflores, en sentido hacia Isla de la Cartuja.

La reapertura parcial reduce las complicaciones previstas para los accesos al Estadio de La Cartuja, un punto especialmente sensible durante los próximos días debido a los eventos deportivos programados como fue el encuentro entre la selección española y Turquía, y el partido Betis–Girona, previsto para el domingo 23.

La situación de la SE-20 amenazaba con generar atascos severos en estas citas, aunque la actualización del estado de la vía alivia en parte las previsiones más pesimistas.

Los problemas comenzaron el sábado 15 de noviembre, cuando la Policía Local se vio obligada a activar desvíos en distintos tramos de la SE-20. Las intensas precipitaciones dejadas por la borrasca habían provocado socavones y deformaciones en la calzada, lo que llevó a cerrar sectores completos de la circunvalación por motivos de seguridad.

Emergencias Sevilla mantuvo durante el fin de semana un amplio dispositivo para evaluar los daños, coordinar reparaciones urgentes y restablecer el tráfico lo antes posible. No fue hasta la tarde del lunes 17 cuando se pudo reabrir la mayor parte de la vía.

Durante las tareas, se recomendó a los conductores seguir las indicaciones de los agentes y evitar la zona en la medida de lo posible.

El alcalde de la ciudad, José Luis Sanz, reconoció que el cierre de la SE-20 coincidió con una situación de alerta meteorológica, generando un auténtico “colapso” en varias zonas de la capital. La falta de alternativas y la necesidad de redirigir los vehículos hacia el interior urbano provocaron atascos de gran magnitud, especialmente en horas punta.

Sanz señaló además que la vía arrastraba un problema estructural previo. Recordó que la SE-20 fue transferida al municipio en 2022 tras su etapa como carretera estatal, pero que desde entonces no se había destinado “ni un euro” a tareas de mantenimiento.

Según afirmó, está pendiente una inversión de siete millones de euros destinada a su reparación integral, un proyecto cuyo inicio sigue sin fecha concreta.

Otros daños relevantes en la provincia de Sevilla

La borrasca Claudia también dejó una de las incidencias más llamativas en la A-476, a la altura de El Castillo de las Guardas, donde un enorme socavón provocó la caída de un vehículo con cuatro ocupantes.

Los servicios sanitarios atendieron a los afectados, aunque no han trascendido detalles sobre su estado. Bomberos, equipos de mantenimiento y agentes de la Guardia Civil se desplazaron rápidamente hasta el lugar tras recibir un aviso en torno a las 17:10 horas del domingo.

Ese mismo día, en Castilblanco de los Arroyos, varias personas tuvieron que ser rescatadas después de quedar atrapadas en el Camino de la Ermita de San Benito, completamente inundado por las fuertes lluvias.

Las precipitaciones intensas, como las registradas durante la borrasca Claudia, pueden provocar daños significativos en la estructura del asfalto. Cuando el agua penetra a través de pequeñas fisuras de la calzada, se filtra hasta las capas inferiores, debilitando su base y generando hundimientos o socavones.

Si las lluvias son persistentes, este proceso se acelera y puede causar fracturas internas que no siempre son visibles a simple vista.

El tráfico pesado agrava el deterioro, ya que ejerce presión sobre un pavimento ya saturado de humedad. En episodios de lluvias extremas, la combinación de filtraciones, erosión y peso de los vehículos puede desencadenar fallos repentinos, como los vividos recientemente en varias carreteras de la provincia.