La Dirección General de Tráfico (DGT) ha intensificado su vigilancia en las carreteras sevillanas con la instalación de nuevos radares fijos en puntos estratégicos. Uno de los últimos en incorporarse a este sistema de control de velocidad se encuentra en la A-4, a la altura del aeropuerto de San Pablo, en dirección a Córdoba. Este dispositivo, ubicado estratégicamente entre unos arbustos en el margen derecho de la vía, vigila un tramo con un límite de velocidad de 120 km/h y cuenta con la señalización informativa correspondiente unos metros antes, justo después del desvío al aeropuerto.
Con esta nueva instalación, la DGT busca reforzar el control de velocidad en los accesos y salidas de la capital hispalense, contribuyendo así a mejorar la seguridad vial y reducir el número de accidentes. Además de este nuevo radar en la A-4, se ha informado recientemente de la instalación de otro dispositivo similar en la A-49 (Autovía del V Centenario), en sentido creciente hacia Huelva, con un límite de velocidad de 90 km/h.
Estos nuevos radares, que entraron en funcionamiento entre septiembre y octubre, se suman a otros dispositivos ya existentes en la provincia de Sevilla y forman parte de una estrategia más amplia de la DGT para intensificar los controles de velocidad en todo el territorio nacional.
La velocidad es uno de los principales factores de riesgo en los accidentes de tráfico. Circular a una velocidad excesiva reduce el tiempo de reacción del conductor y aumenta la distancia de frenado, lo que puede tener consecuencias fatales en caso de colisión. Además, la velocidad excesiva incrementa la gravedad de las lesiones en caso de accidente.
Sevilla refuerza su red de control de velocidad con 15 radares fijos
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha intensificado su presencia en las carreteras sevillanas con la instalación de dos nuevos radares fijos, uno en la A-4 a la altura del aeropuerto de San Pablo y otro en la A-49. Con estas incorporaciones, la ciudad cuenta ya con un total de 15 controles de velocidad distribuidos estratégicamente en las principales vías de acceso y salida.
Esta amplia red de radares fijos se ha desplegado con el objetivo de mejorar la seguridad vial y reducir la siniestralidad en las carreteras sevillanas. Los dispositivos están ubicados en puntos clave, como puentes, accesos a autovías y carreteras de alta capacidad, donde se han registrado históricamente un mayor número de infracciones por exceso de velocidad.
¿Dónde están ubicados los radares fijos en Sevilla?
Puente del Quinto Centenario (SE-30): Cuatro radares controlan los distintos sentidos de circulación en este importante enlace vial.
A-49 (Autovía del V Centenario): Dos radares vigilan los accesos a Sevilla por esta vía.
A-4 (Autovía de Andalucía): Dos radares controlan la velocidad en los accesos a la ciudad por esta vía principal.
A-92: Dos radares vigilan los accesos a Sevilla por esta vía.
Ronda Norte SE-20: Un radar controla la velocidad en sentido creciente.
SE-30: Dos radares adicionales complementan el control de velocidad en esta vía de circunvalación.
Carretera a Montequinto (A-376): Dos radares vigilan los accesos a Montequinto.
¿Cuál es el objetivo de esta red de radares?
La instalación de estos radares tiene como objetivo principal disuadir a los conductores de cometer infracciones por exceso de velocidad. Al conocer la existencia de estos dispositivos, los conductores tienden a moderar su velocidad, lo que reduce el riesgo de accidentes y contribuye a una mayor seguridad vial.
Recomendaciones para los conductores
Para evitar sanciones y, sobre todo, para garantizar la seguridad vial, se recomienda a los conductores:
-Es fundamental circular a la velocidad indicada en cada tramo de la vía.
-Mantener una distancia de seguridad adecuada. Esto permitirá reaccionar a tiempo ante cualquier imprevisto.
-No distraerse al volante pues el uso del teléfono móvil, la manipulación de dispositivos electrónicos o cualquier otra distracción pueden provocar accidentes.
-Adaptar la velocidad a las condiciones de la vía: Las condiciones climatológicas, el estado de la calzada y la visibilidad pueden afectar a la adherencia del vehículo y, por lo tanto, a la distancia de frenado.
La instalación de nuevos radares en Sevilla es una medida necesaria para garantizar la seguridad vial y concienciar a los conductores sobre la importancia de respetar los límites de velocidad.
