Sevilla recuperará pronto su emblemática cruz de la plaza de Santa Marta

Su instalación, que requerirá el uso de medios auxiliares, se llevará a cabo en dos días.

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Plaza de Santa Marta en el Barrio de Santa Cruz de Sevilla.
Cruz en la Plaza de Santa Marta.

Tras un año de ardua labor, la ciudad de Sevilla está a punto de recuperar uno de sus símbolos más queridos: la cruz de la Plaza de Santa Marta. Los trabajos de restauración, llevados a cabo por la empresa Dédalo Bienes Culturales, S.L., han entrado en su fase final y se estima que la pieza será restituida a su emplazamiento original entre el 14 y el 22 de noviembre.

La complejidad de esta intervención ha radicado en la naturaleza de los daños sufridos por la cruz. El acto vandálico que destrozó la pieza en octubre del año pasado dejó lesiones profundas y irreparables, obligando a los restauradores a emplear técnicas artesanales y a realizar una exhaustiva investigación histórica para garantizar la fidelidad de la restauración.

Gracias a un proyecto de investigación en colaboración con la Universidad de Sevilla y el apoyo del Servicio de Archivo Municipal, se ha logrado reconstruir la historia de la cruz y determinar las características originales de los materiales utilizados. Un análisis detallado de los fragmentos ha revelado que algunas partes de la cruz eran reposiciones posteriores, lo que ha exigido una minuciosa labor de investigación para reproducir fielmente los materiales y acabados originales.

La restauración de la cruz de Santa Marta ha sido un proceso largo y complejo, pero el resultado final será un testimonio del compromiso de la ciudad con su patrimonio histórico. La recuperación de esta emblemática pieza no solo representa la reparación de un daño, sino también la reafirmación de la identidad y la historia de Sevilla.

La restauración de la cruz de Santa Marta

En estos momentos, los restauradores de Dédalo Bienes Culturales se centran en la réplica de piezas clave como la columna del soporte, el brazo abalaustrado superior y el injerto de la stipes.

La complejidad de estas tareas radica en la necesidad de garantizar una integración perfecta de las nuevas piezas con las originales. Para ello, se está empleando un criterio de reintegración invisible, que permite distinguir las zonas restauradas solo mediante un examen detallado. El injerto de la stipes, en particular, representa un desafío debido a la irregularidad de la fractura original. Los técnicos están trabajando de forma minuciosa para lograr una adaptación perfecta y garantizar la estabilidad de la pieza.

Según el cronograma previsto, las nuevas piezas serán trasladadas a la Plaza de Santa Marta durante la primera semana de noviembre. Su instalación, que requerirá el uso de medios auxiliares, se llevará a cabo en dos días. Posteriormente, se aplicará un hidrofugante para proteger la cruz de las inclemencias del tiempo y se retirarán los andamios.

Es importante destacar que, además de la réplica de las piezas dañadas, los restauradores están evaluando la posibilidad de reforzar internamente uno de los brazos laterales de la cruz, con el objetivo de garantizar su estabilidad a largo plazo.

La restauración de la cruz de Santa Marta es un proyecto de gran envergadura que requiere una gran precisión y cuidado. Gracias al trabajo de los restauradores y al apoyo de las instituciones, Sevilla podrá recuperar pronto uno de sus símbolos más queridos.