La lluvia se resiste a abandonar Sevilla y lo seguirá demostrando durante buena parte de esta primera semana de marzo. Tras varios días de inestabilidad y cielos cubiertos, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) confirma que las precipitaciones seguirán siendo protagonistas, al menos, hasta el próximo lunes. La capital hispalense y gran parte de la provincia permanecerán bajo el influjo de una sucesión de borrascas que dejarán lluvias intensas, tormentas puntuales y un notable descenso térmico conforme avance la semana.
Miércoles pasado por agua: las horas clave de las lluvias
El miércoles 5 de marzo será uno de los días más lluviosos de la semana, con una probabilidad de precipitaciones que alcanza el 100% en determinadas franjas horarias. Según Aemet, las lluvias más intensas se esperan entre las 15:00 y las 19:00 horas, cuando los cielos permanecerán cubiertos y se podrían registrar hasta 5 litros por metro cuadrado en algunos puntos de la capital. Estas lluvias podrían venir acompañadas de tormentas aisladas, especialmente en zonas del Aljarafe y la campiña sevillana.
Aunque fuera de ese tramo la probabilidad de lluvia desciende ligeramente, las precipitaciones podrían reaparecer de forma intermitente a lo largo de la jornada, acompañadas de viento moderado y temperaturas suaves, con máximas en torno a los 20 grados.
Jueves y viernes: continuidad de las lluvias y bajada progresiva de temperaturas
La inestabilidad persistirá el jueves, con chubascos que podrían ser especialmente intensos durante la madrugada y las primeras horas de la mañana. Aemet mantiene activa la alerta amarilla por lluvias, que podrían acumular hasta 15 litros por metro cuadrado en apenas una hora. El cielo permanecerá cubierto prácticamente toda la jornada, con lluvias menos frecuentes durante la tarde, aunque no se descartan chubascos aislados.
El viernes, la situación meteorológica dará un pequeño respiro en cuanto a la intensidad de las lluvias, aunque la probabilidad de precipitaciones seguirá siendo alta, superior al 70% durante buena parte del día. Las temperaturas comenzarán a descender de manera más notable, con máximas que rondarán los 17 grados y mínimas que caerán por debajo de los 10.
Fin de semana: ambiente más frío y lluvias persistentes
El sábado llegará con cielos muy nubosos y precipitaciones intermitentes, especialmente durante la tarde y la noche. Las temperaturas seguirán en descenso, con mínimas de 9 grados y máximas que no superarán los 15. El viento de componente suroeste aumentará la sensación de frío.
El domingo, el tiempo no dará tregua. La probabilidad de lluvia se mantendrá cercana al 100% durante gran parte de la jornada, con cielos cubiertos y lluvias moderadas a fuertes en distintos puntos de la provincia. Las temperaturas seguirán bajando, con mínimas de 8 grados y máximas que apenas alcanzarán los 14 o 15.
Un inicio de marzo marcado por las borrascas
Con este panorama, Sevilla enlazará casi dos semanas seguidas bajo la lluvia, ya que las precipitaciones no han cesado desde el pasado jueves. Esta situación viene marcada por la entrada de sucesivas borrascas atlánticas que están afectando a todo el suroeste peninsular y que han dejado acumulados de agua importantes en muchas zonas de la provincia.
Aemet prevé que la inestabilidad se mantenga al menos hasta el lunes 10 de marzo, cuando podrían darse las últimas lluvias antes de una posible mejora de las condiciones meteorológicas. No obstante, los modelos apuntan a que marzo podría continuar con un patrón de lluvias frecuente, lo que refuerza la idea de que este año el mes llegará cargado de agua.
Consejos ante el temporal
Ante esta situación, las autoridades recomiendan extremar la precaución en desplazamientos por carretera, especialmente en zonas rurales y de sierra donde las lluvias pueden provocar acumulaciones de agua y desbordamientos puntuales. Además, se aconseja revisar el estado de canalones, desagües y tejados para evitar filtraciones y acumulaciones de agua.
El paraguas, el chubasquero y las botas de agua seguirán siendo imprescindibles para los sevillanos en estos días de marzo que, por ahora, se parecen más al invierno que a la inminente primavera.