
Sevilla ante la nueva ley de patinetes: lo que cambiará en 2026
La normativa, aprobada en el Congreso en 2024 y con entrada en vigor fijada para 2026, contempla diferentes cambios fundamentales

Los patinetes eléctricos han pasado en pocos años de ser un elemento casi anecdótico a convertirse en parte fundamental de la movilidad urbana en Sevilla para muchos usuarios.
Pero a partir de 2026, la nueva ley estatal endurecerá las condiciones de uso con el objetivo de reducir accidentes y ordenar el espacio público.
Miles de sevillanos que hoy dependen de este medio de transporte tendrán que adaptarse a un escenario bien diferente, marcado por más controles y obligaciones.
Qué establece la nueva ley de patinetes
La normativa, aprobada en el Congreso en 2024 y con entrada en vigor fijada para 2026, contempla diferentes cambios fundamentales como:
-Casco obligatorio para todos los usuarios, independientemente de la edad.
-Seguro de responsabilidad civil, similar al que tienen los ciclomotores.
-Velocidad máxima de 25 km/h, con sanciones para quienes manipulen los vehículos para superar ese límite de velocidad.
-Prohibición de circular por aceras y zonas peatonales, limitando su uso a calzadas, carriles bici y vías que estén autorizadas.
-Registro nacional de vehículos de movilidad personal, lo que obligará a matricular cada patinete.
El Ministerio de Transportes asegura que estas medidas buscan equiparar la seguridad de los patinetes con la de otros vehículos, tras el aumento considerable de accidentes en los últimos años.
Cómo afecta a Sevilla y sus usuarios
Se estima que en Sevilla circulan en torno a 34.000 patinetes eléctricos, teniendo en cuenta tanto los de uso particular como los de alquiler por minutos.
Este cálculo se desprende de aplicar un índice medio de uso urbano (5 % de la población) sobre los casi 800.000 habitantes de la ciudad.
Para una urbe con una red ciclista afianzada, los patinetes se han convertido en una alternativa rápida frente al coche en desplazamientos de corta distancia.
No obstante la obligación de contratar un seguro y registrar los vehículos supondrá un aumento de costes para los usuarios habituales.
A su vez, el casco pasará a ser un elemento imprescindible, lo que cambiará la imagen de un transporte hasta ahora asociado a la comodidad y la inmediatez.
Las empresas de alquiler también deberán adaptarse ya que será obligatorio que todos sus vehículos estén asegurados y registrados, lo que podría derivar en una subida de tarifas.
Esto afectaría especialmente a los jóvenes y turistas, dos de los colectivos que más utilizan este servicio en Sevilla.
La capital andaluza, pionera en infraestructuras ciclistas, afronta el reto de integrar los patinetes dentro de un marco más regulado.
La Policía Local de Sevilla tendrá un papel clave en la vigilancia del cumplimiento de la norma, algo que hasta ahora resultaba complejo por la falta de regulación clara.
Con estas medidas, el Ayuntamiento espera reducir conflictos entre peatones, ciclistas y usuarios de patinetes, que en los últimos años han generado quejas en barrios céntricos como Triana, Nervión o el Casco Antiguo.
Igualmente el consistorio prevé habilitar más aparcabicis y zonas de estacionamiento para ordenar el espacio público.
Aunque muchos usuarios perciben la nueva ley como una restricción, expertos en movilidad apuntan que podría ser el paso necesario para afianzar al patinete como una alternativa de transporte segura, estable y aceptada socialmente.