Tras casi ocho meses de intensas obras de remodelación, la calle Zaragoza de Sevilla reabrirá parcialmente sus puertas al tráfico este viernes 29 de noviembre. Momento importante que coincide con las fiestas navideñas y será la revitalización del centro histórico de la ciudad, devolviendo la fluidez a una de sus arterias principales.
¿Qué implica esta reapertura parcial?
En una primera fase, se habilitará el tramo comprendido entre las calles San Pablo y Doña Guiomar, tal y como se había adelantado previamente. Los conductores podrán acceder a la Plaza Nueva a través de las calles Carlos Cañal y Bilbao, además de contar con la posibilidad de girar a la derecha hacia la calle Doña Guiomar.
¿Y el tramo restante?
El tramo final de la calle Zaragoza, que conecta Doña Guiomar con la Plaza Nueva, permanecerá cerrado al tráfico hasta el próximo 20 de diciembre. Durante este periodo, esta zona se mantendrá exclusivamente peatonal, permitiendo a los ciudadanos disfrutar de un espacio más tranquilo y seguro para pasear. Sin embargo, a partir del 20 de diciembre, el tráfico rodado se restablecerá de forma definitiva en toda la calle Zaragoza.
¿Qué beneficios traerá esta reapertura?
La vuelta del tráfico a la calle Zaragoza contribuirá a mejorar la movilidad en el centro histórico de Sevilla, facilitando los desplazamientos de vecinos, trabajadores y visitantes. Además, la remodelación de la vía ha permitido mejorar la accesibilidad, la seguridad y la estética de esta importante arteria, convirtiéndola en un espacio más agradable para todos.
¿Qué dicen los vecinos?
Los vecinos de la zona han recibido con satisfacción la noticia de la reapertura parcial de la calle Zaragoza. A través de un comunicado de Emasesa, se les ha informado de los plazos de las obras y de los cambios en la circulación. En general, se muestran optimistas ante las mejoras que esta remodelación traerá a su barrio.
¿Qué ha cambiado?
La reurbanización de la calle Zaragoza ha incluido la renovación del pavimento, la mejora de la accesibilidad para personas con movilidad reducida y la plantación de nuevo arbolado. El resultado es una vía más atractiva y sostenible, que se integra de manera más armoniosa en el entorno histórico de la ciudad.
Un proceso necesario Aunque las obras han generado algunas molestias a vecinos y comerciantes, la inversión de 2,1 millones de euros ha sido necesaria para modernizar las redes de saneamiento, mejorar la accesibilidad y adaptar la estética de la calle a los estándares actuales. Además de la renovación del pavimento, se ha instalado una nueva red de baldeo y se han mejorado las conducciones de agua potable y saneamiento.
¿Cómo afecta esto a la movilidad?
Con la reapertura parcial, el tráfico en el centro histórico de Sevilla experimenta cambios significativos. Los conductores deben adaptarse a las nuevas señalizaciones y rutas, utilizando las calles Carlos Cañal y Bilbao para acceder a la Plaza Nueva. Asimismo, la calle Méndez Núñez ha cambiado de sentido, facilitando la circulación en esta zona.
Desde el Ayuntamiento se recomienda a los ciudadanos que planifiquen sus desplazamientos con antelación, consultando los nuevos itinerarios y utilizando, en la medida de lo posible, el transporte público o medios de transporte alternativos como la bicicleta o el transporte a pie.
