La Policía Nacional activa la operación Cirio con el objetivo de prevenir delitos y responder con rapidez ante cualquier incidente durante los días de mayor afluencia en el centro de Sevilla.
La propuesta municipal contemplaba compensaciones únicamente para el Viernes de Dolores y el turno de la Madrugá, algo que los sindicatos consideran insuficiente.
Según un informe técnico de Emvisesa, al que ha tenido acceso este medio, Contursa justificó su petición en “razones de interés público”, al considerar que la parcela es esencial para mejorar la operatividad del recinto ferial.
La decisión, tomada por motivos organizativos y de seguridad, pone sobre la mesa una realidad cada vez más común en las cofradías con gran afluencia de hermanos.
La capital andaluza afronta una jornada marcada por la inestabilidad atmosférica, con lluvias generalizadas desde primera hora del día y un repunte de los chubascos más fuertes durante la tarde.
La estampida colectiva vivida en la “Madrugá del Pánico” en Sevilla en el año 2000 puede explicarse desde una perspectiva psicológica como un ejemplo casi de manual de pánico colectivo o histeria colectiva.
De acuerdo con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), ya desde este mismo martes 1 de abril se registran altas probabilidades de lluvia en Sevilla, alcanzando hasta un 95% durante la madrugada.
El caso ha trascendido el ámbito judicial y ha calado en la opinión pública, especialmente tras la participación de María León en un programa televisivo en el que relató el episodio como una experiencia traumática y de abuso de poder.
El denominado “reloj interno”, que regula funciones como la temperatura corporal, la secreción hormonal o los ciclos de vigilia y descanso, se ve alterado con el cambio horario.