
Nuevo tercer carril en la AP-4: el curioso experimento en Las Cabezas de San Juan

La autopista AP-4, uno de los principales ejes de comunicación entre Sevilla y Cádiz, ha incorporado desde este sábado una medida experimental para descongestionar el tráfico, se trata del uso del arcén como tercer carril provisional.
La iniciativa ha sido impulsada por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, se aplica en el sentido Cádiz, concretamente entre los puntos kilométricos 41,12 y 44,5, a la altura de Las Cabezas de San Juan.
El objetivo es claro y se marca el poder mitigar los atascos que se repiten cada fin de semana, especialmente durante la temporada estival y en operaciones especiales de tráfico. El tramo afectado es uno de los más conflictivos de esta vía, ya que en él confluyen los vehículos que se dirigen hacia la A-471, que conecta con municipios como Lebrija, Trebujena o Sanlúcar de Barrameda.
Una solución “dinámica” y temporada para la AP-4
El sistema implantado se enmarca en las denominadas medidas de gestión de tráfico de uso temporal. En este caso, el arcén derecho de la calzada se habilita como un carril adicional únicamente en momentos de alta demanda.
La activación se señala mediante paneles de mensaje variable y señalización vertical, esto sirve para indicar a los conductores cuándo pueden circular por esta vía suplementaria.
Con esta actuación, el Ministerio busca “un uso más eficiente de las infraestructuras existentes, evitando costosas obras de ampliación y adaptándose a picos de tráfico concretos”. El experimento, según fuentes del departamento, podría extenderse a otros tramos de la AP-4 o a distintas carreteras de la red estatal si los resultados son positivos.
Pese a la novedad, el estreno de este tercer carril provisional ha pasado casi desapercibido para los conductores y ha seguido habiendo atascos en la zona. Durante las primeras horas de funcionamiento, fueron pocos los vehículos que se aventuraron a circular por el arcén habilitado.
Entre las posibles causas, se apuntan la falta de costumbre de esta medida, la percepción de que el arcén sigue siendo un espacio reservado a emergencias o la escasa difusión de la medida antes de su puesta en marcha.
“Para un tercer carril en la AP-4 sólo se necesita pintura”, ironizaban algunos usuarios en redes sociales, haciendo alusión al hecho de que la intervención ha consistido, esencialmente, en marcar la nueva delimitación con pintura vial y señalización adicional.
Un eje vital para Cádiz
La AP-4 es mucho más que una autopista de peaje liberado desde 2020, se trata de una vía estratégica para el desarrollo económico de Cádiz. Su conexión directa con la bahía de Algeciras, uno de los puertos más importantes del Mediterráneo, la convierte en un corredor logístico esencial.
Igualmente su papel en el turismo es indiscutible, ya que facilita el acceso a las playas y destinos culturales de la provincia.
Especialmente crítico es el tramo entre Sevilla y la salida de Las Cabezas de San Juan, donde se registra el mayor volumen de circulación. Desde este punto, la A-471 canaliza el tráfico hacia la costa occidental gaditana, multiplicando la presión sobre la autopista en fechas de gran afluencia.
El Ministerio de Transportes evaluará en las próximas semanas la eficacia de la medida. Se analizarán datos como la reducción de tiempos de viaje, la fluidez del tráfico y la incidencia de posibles incidentes. Si los resultados son satisfactorios, no se descarta su aplicación en otras carreteras, tanto en Andalucía como en el resto del país.
La propuesta, hasta el momento, se enfrenta al reto de convencer a los conductores de que el arcén puede convertirse, en determinadas circunstancias, en un aliado seguro y útil para llegar antes a su destino. El tiempo y la experiencia dirán si este tercer carril improvisado se convierte en una solución recurrente o en una mera anécdota del verano.