Las dudas por resolver en el caso de la desaparición y muerte de Álvaro Prieto

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Son muchas las dudas que han quedado tras el trágico desenlace en la desaparición de Álvaro Prieto, joven cordobés de 18 años cuya comunicación se perdió hace días cuando estaba pasando el día de fiesta en Sevilla, fue el miércoles 11 de octubre en el que estuvo en una discoteca con sus amigos.

Aparición del cuerpo

La cronología de los hechos ubican al joven el jueves por la mañana en la estación cuando intentó abordar un tren, lo cual resultó imposible. Las cámaras de la estación capturaron su salida de Santa Justa. Este lunes, se encontró su cuerpo sin vida entre dos vagones de un tren que llevaba inmovilizado desde agosto.

Estos son los hechos confirmados en el caso de la desaparición y fallecimiento de este joven cordobés. Lo que sucedió desde su salida de la estación alrededor de las nueve de la mañana del jueves, hasta la mañana de este lunes, cuando una cámara de TVE casualmente grabó la imagen de un cuerpo entre dos vagones de tren, sigue lleno de dudas, de incógnitas, de preguntas.

Álvaro estaba sin efectivo y con la batería de su teléfono móvil descargada. Fue desalojado de la estación por el personal de seguridad y la primera duda: ¿Por qué no acudió al centro de atención al cliente y expuso el problema? Parece que a Álvaro se le ofreció un cargador y que aguardara a una mínima carga pero lo rechazó. Incluso en el puesto de la Policía Nacional en la Estación de Santa Justa se habría brindado a ayudarlo cargando el móvil o facilitándole la llamada.

Mensaje a la familia y pérdida del tren de regreso

Según los relatos de familiares y amigos, Álvaro tenía un billete de regreso a Córdoba en un tren que saldría temprano en la mañana del jueves. Con poca batería en su teléfono móvil, envió a sus padres un último mensaje a las 7:20 a.m. informándoles que se dirigía a la estación.

Sin embargo, Álvaro no llegó a tiempo para abordar ese tren. Sin dinero en efectivo ni batería en su teléfono para comprar otro billete, intentó subirse a un tren de alta velocidad con destino a Barcelona que hacía una parada en Córdoba. Para lograrlo, saltó las vías, pero el personal de la estación se percató de ello, lo interceptó y le impidió subir al vagón.

La última imagen de Álvaro con vida fue captada por las cámaras de Santa Justa mientras salía de la estación en dirección a la avenida de Kansas City, una larga vía que es la salida por carretera de Sevilla hacia Córdoba.

Pérdida del rastro y comunicación

Tras la salida de Álvaro de la estación, su paradero se vuelve desconocido. Al no tener noticias de él, sus padres denuncian su desaparición a la policía, lo que lleva a iniciar una investigación, dadas las circunstancias y el perfil del joven, un estudiante ejemplar sin aparentes problemas. En su opinión no se trataba de una desaparición voluntaria.

Tras la denuncia, la organización SOS Desaparecidos difunde la imagen de Álvaro y comienzan a llegar las primeras supuestas pistas, así se tiene el relato/testimonio de una mujer que afirma haber visto a un joven con la misma vestimenta que Álvaro, pantalón beige y camisa verde, alrededor de las 10:30 a.m. en la avenida Kansas City.

Otra duda es saber que hizo Álvaro después de abandonar la estación. Su madre declaró en la radio que podría haber intentado hacer autostop para llegar a Córdoba (la avenida de Kansas City enlaza con la carretera a Córdoba) y que algo le pudo haber sucedido. Otra hipótesis planteada fue la posibilidad de un atropello, aunque resultaba extraño que no se encontrara su cuerpo. También se consideró la opción de un secuestro.

Otra posibilidad estudiada es que Álvaro hubiera accedido a la zona de las vías para intentar subirse nuevamente a un tren, la opción más peligrosa pues no es seguro andar por las vías del tren en una zona que, además, está vigilada, aunque en este caso, lamentablemente, la vigilancia en ese punto era nula.

Búsqueda de Álvaro

La Policía Nacional comenzó una intensa búsqueda por la zona de la avenida Kansas City, revisando las cámaras de seguridad ubicadas en la misma. Los amigos y compañeros de equipo de fútbol de Álvaro incluso propusieron organizar una búsqueda colectiva, pero la Policía desaconsejó esta acción.

Este pasado domingo, sobre las 21:00 horas, se acordonó una zona cercana a la estación para que miembros de la Unidad Militar de Emergencia (UME) la rastrearan con perros especializados. La búsqueda fue infructuosa y a las 23:00 horas se concluyó la misma.

Trágico hallazgo del cuerpo

Ayer lunes se comenzarían a buscar por otras zonas e, incluso en las proximidades del área rastreada el día anterior, en una zona de mantenimiento de los trenes ubicada a poco más de un kilómetro de la estación. Pero la sorpresa surgió cuando en un directo de TVE el cámara de «Mañaneros» detectó un cuerpo atrapado entre dos vagones. Infelizmente era el cadáver de Álvaro Prieto, era casi inequívoco pues llevaba la misma ropa del día de su desaparición.

Las dudas son razonables: ¿Por qué Álvaro no pidió ayuda a la Policía, Atención al Cliente de Renfe o cualquier establecimiento de la Estación? ¿Por qué decidió intentar abordar un tren como polizón? ¿Cómo llegó hasta la zona del CCT de Renfe?

El tren en el que se encontró estaba en proceso de reparación, es posible que al saltar la valla buscara un lugar donde esconderse hasta poder abordar un tren -con el peligro que conlleva-. ¿Por qué decidió hacer esto? El tren llevaba desde finales de agosto sin moverse aunque en tareas de mantenimiento y reparación. ¿Nadie reparó en cuatro días en la presencia del cuerpo del joven? ¿Qué hacía el personal de Renfe? ¿Por qué no se encontró antes por los dispositivos de búsqueda?

Causas de la muerte

Más dudas que surgen es el trato que pudo haber recibido el joven en la estación. El informe del forense debe arrojar luz sobre lo sucedido una vez que parece que la causa de la muerte fue por electrocución al tocar la línea del tren, la catenaria. La muerte habría sido inmediata y las marcas encontradas en el cuerpo, sin señales de violencia, son compatibles con la de electrocución como, por ejemplo, quemaduras en las manos o cabello quemado. El Delegado del Gobierno así lo ha confirmado. La última duda: ¿Pudo subir al techo del tren y electrocutarse cayendo en el hueco entre vagones?

Preguntas sin respuestas que deben ir contestándose. Descanse en paz.