El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha puesto el foco en dos de los grandes problemas que afectan a la región en el Debate del Estado de la Comunidad, celebrado este miércoles y jueves en el Parlamento andaluz: la sanidad y la vivienda. En un discurso que mezcló autocrítica y propuestas de reforma, Moreno detalló un conjunto de medidas destinadas a abordar los déficits en atención sanitaria y a ofrecer soluciones a la creciente crisis habitacional que afecta a los andaluces.
La sanidad, un tema especialmente sensible, ocupó buena parte de la intervención del presidente andaluz. Consciente de los problemas que atraviesa el sistema público, Moreno reconoció abiertamente las dificultades a las que se enfrentan los ciudadanos: «Sé que conseguir una cita con el médico de familia es a veces desesperante», admitió. Esta declaración marcó el punto de partida para anunciar una batería de medidas con el objetivo de mejorar la atención primaria, una de las áreas más críticas de la sanidad pública andaluza.
Entre las reformas destacadas, Moreno anunció que los centros de salud estarán obligados a atender a los pacientes que no consigan cita mediante los canales habituales, como la aplicación digital o el teléfono, en un plazo máximo de 72 horas. Esta atención podría ser ofrecida por un médico de familia distinto al habitual o, incluso, por facultativos disponibles en otras provincias a través de consultas telefónicas. La medida busca garantizar que ningún ciudadano quede desatendido por saturación en el sistema de asignación de citas.
Otro cambio significativo será la reducción del porcentaje de citas reservadas para imprevistos en los centros de salud. Actualmente, el 50% de las citas se destinan a este propósito, lo que, según Moreno, ha generado ineficiencias al dejar turnos vacíos sin aprovechar. Con la nueva normativa, sólo se reservará un máximo del 7% de las citas para urgencias, optimizando así la gestión del tiempo y los recursos disponibles en cada centro.
Además, el Gobierno andaluz ampliará la continuidad asistencial en todos los distritos sanitarios, una iniciativa que permitirá a los médicos de familia extender su jornada laboral a las tardes. Este modelo, ya implementado parcialmente, ha demostrado su eficacia: en el último año se han sumado 240.000 horas adicionales de atención sanitaria, según destacó Moreno.
Desde un punto de vista presupuestario, el presidente enfatizó que la sanidad pública andaluza cuenta ahora con más recursos que nunca. Según los datos proporcionados, el gasto por habitante ha aumentado en 600 euros desde 2018, lo que sitúa a Andalucía en un máximo histórico en términos de inversión sanitaria. Sin embargo, Moreno reconoció que la inyección de fondos no ha sido suficiente para calmar las quejas de los usuarios. Para reforzar el sistema, se comprometió a incorporar 7.000 nuevos profesionales al Servicio Andaluz de Salud (SAS) en 2025, con una previsión de repetir esta cifra en 2026.
La vivienda: un desafío de urgencia
El acceso a una vivienda digna, señalado por Moreno como el segundo gran problema que afecta a los andaluces, protagonizó otra parte destacada de su intervención. Para hacer frente a esta problemática, la Junta de Andalucía lanzará un Plan de Choque que busca promover la construcción de 20.000 nuevas viviendas protegidas. Según explicó el presidente, este plan tiene como objetivo aumentar la oferta de vivienda asequible, especialmente para los sectores más vulnerables.
El presidente también abordó el impacto del turismo en el mercado inmobiliario, un tema que ha generado un intenso debate en los últimos años. Moreno anunció que el Gobierno andaluz implementará medidas para reforzar las limitaciones a las viviendas turísticas, siempre y cuando los ayuntamientos lo soliciten. Este enfoque permitirá que las restricciones se adapten a las necesidades de cada municipio, evitando una regulación generalizada que podría no ajustarse a las particularidades locales.
Entre las medidas para facilitar el acceso a la vivienda, Moreno destacó la ampliación del Programa de Garantía Joven, que ahora incluirá a personas de hasta 40 años. Este programa, diseñado para ayudar a los jóvenes a adquirir su primera vivienda, permite a la Junta avalar el 15% de la entrada, reduciendo así la barrera económica que supone este primer paso. Adicionalmente, el presidente anunció una nueva Ley de Vivienda que incluirá la creación de una bolsa de suelo a precios asequibles. Este mecanismo facilitará la construcción de nuevas viviendas protegidas, contribuyendo a aliviar la presión del mercado inmobiliario.
Una hoja de ruta para Andalucía
El Debate del Estado de la Comunidad ha servido como marco para que el Gobierno andaluz esboce su hoja de ruta para los próximos años. Con estas medidas, Juanma Moreno busca responder a las principales demandas de los andaluces, marcando un rumbo que combina reformas estructurales con iniciativas a corto plazo.
En el ámbito sanitario, el reto pasa por garantizar una atención más rápida y eficiente en la atención primaria, mientras que en el terreno de la vivienda, el objetivo es frenar el alza de los precios y ofrecer soluciones habitacionales a quienes más lo necesitan. El éxito de estas medidas dependerá, en gran parte, de su implementación efectiva y del apoyo que logren recabar tanto entre los profesionales afectados como entre la ciudadanía.