La escasez de personal médico en Andalucía ha alcanzado un punto crítico, lo que ha llevado a las autoridades sanitarias a plantear la posibilidad de cerrar centros de salud durante el verano. Esta situación, calificada como «dramática» por la consejera de Salud, Catalina García, se debe a la combinación de varios factores:
Falta de médicos de familia: En la provincia de Sevilla hay 67 plazas de médico de familia vacías, lo que supone una gran carga de trabajo para los médicos restantes.
Falta de especialistas: El déficit de médicos afecta a varias especialidades, pero es especialmente grave en Atención Primaria.
Dificultades para contratar personal: Los nuevos médicos que se incorporan al sistema sanitario no eligen Medicina de Familia, y los que sí la eligieron hace cuatro años aún no han finalizado su formación.
Jubilaciones y bajas: La situación se agrava por las jubilaciones y bajas de los médicos actuales.
Las consecuencias de esta crisis son graves:
Mayor carga de trabajo para los médicos: Los médicos que quedan tienen que atender a más pacientes, lo que aumenta el riesgo de errores médicos y reduce la calidad de la atención.
Aumento de los tiempos de espera: Los pacientes tienen que esperar más tiempo para ser atendidos, tanto en las consultas como en las pruebas diagnósticas.
Posibles cierres de centros de salud: En el peor de los casos, algunos centros de salud podrían verse obligados a cerrar sus puertas durante el verano.
Para evitar que esta situación se agrave, las autoridades sanitarias han pedido ayuda al gobierno central y han tomado algunas medidas:
Reclamar más plazas MIR: La Junta de Andalucía ha pedido al gobierno central que aumente el número de plazas de Médico Interno Residente (MIR) para la especialidad de Medicina de Familia.
Contratar médicos extracomunitarios: La Junta está estudiando la posibilidad de contratar médicos extracomunitarios para cubrir las vacantes.
Incentivar a los médicos para que trabajen en zonas rurales: Se están poniendo en marcha medidas para incentivar a los médicos para que trabajen en zonas rurales, donde la escasez de personal es aún mayor.
Sin embargo, estas medidas podrían no ser suficientes para evitar el cierre de algunos centros de salud este verano. La situación es crítica y requiere una solución urgente por parte de todas las administraciones.
Sindicatos y colegios médicos alertan de un verano «catastrófico»
Los sindicatos médicos alzan la voz y critican duramente la gestión de la sanidad andaluza ante la inminente llegada del verano. El Sindicato Médico Andaluz califica de «ridículo» el plan del SAS de utilizar a los médicos residentes (MIR) para cubrir las vacantes y evitar el colapso de la Atención Primaria. Argumentan que muchos de los médicos de Atención Primaria no tienen especialidad y cobran más que los MIR, a pesar de tener menos formación.
Proponen incentivar económicamente a los MIR para que trabajen durante el verano, pero insisten en que la solución a largo plazo pasa por mejorar las condiciones laborales y retributivas de los médicos de Atención Primaria.
El Consejo Andaluz de Colegios de Médicos (CACM) también se muestra preocupado por la falta de información sobre el plan del SAS para el verano. Afirman que se han puesto a disposición de la Consejería de Salud para colaborar, pero que no han recibido ninguna propuesta concreta.
Más allá del verano, la situación de la Atención Primaria en Andalucía es aún más preocupante: La jubilación de los médicos del baby boom no ha sido compensada con la incorporación de nuevos profesionales, debido a los recortes en el número de plazas MIR entre 2010 y 2016. Aunque el número de plazas MIR ha aumentado desde 2017, aún no es suficiente para cubrir la demanda, ya que los nuevos médicos tardan cuatro años en formarse. La medicina de familia es cada vez menos atractiva para los jóvenes médicos, lo que agrava el problema de la falta de personal.
En Andalucía, el 30% de las plazas MIR de Medicina de Familia quedan sin cubrir, a pesar de ser la especialidad con más plazas disponibles.
De no tomarse medidas urgentes, la sanidad andaluza se enfrenta a un futuro muy negro, con un posible colapso de la Atención Primaria y un aumento considerable de los tiempos de espera para los pacientes.
¿Habrá médicos para atender a los pacientes?
La escasez de médicos en Andalucía es un problema que no solo afecta al presente, sino que también tiene un futuro muy preocupante. Según el Informe de Demografía Médica en Andalucía 2023 del CACM, en la provincia de Sevilla más de 1.600 médicos se jubilarán en los próximos diez años. La cifra exacta de médicos de familia que se jubilarán no se especifica, pero se presume que será alta debido al elevado número total de jubilaciones.
Ante esta situación, el SAS está tomando algunas medidas para retener a los médicos en activo el mayor tiempo posible. A cierre del año pasado, 255 médicos de más de 65 años seguían trabajando en la provincia de Sevilla. Además, el SAS ha incluido en su Plan de Ordenación de Recursos Humanos la posibilidad de que determinado personal sanitario pueda trabajar hasta los 70 años.
Sin embargo, estas medidas podrían no ser suficientes para evitar la falta de médicos de familia en los próximos años.
¿Habrá médicos suficientes este verano? La Junta de Andalucía ha anunciado que está trabajando en el Plan Verano, que incluirá 32.000 contrataciones (entre atención hospitalaria y primaria). De estas contrataciones, 2.000 se realizarán en mayo y octubre y las otras 30.000 en los meses de verano.
Los contratos serán de entre uno y tres meses. El objetivo es mantener los centros de salud abiertos por la mañana y cerrarlos por la tarde en función de la demanda. En Sevilla capital, la zona de mayor población, esto se ha traducido en los últimos años en que solo nueve ambulatorios están disponibles por la tarde. En el resto de la provincia, la atención se concentrará en puntos estratégicos debido a la imposibilidad de mantener activos todos los centros de salud y consultorios.
