El Ministerio de Sanidad ha anunciado que la mascarilla volverá a ser obligatoria en todos los centros sanitarios de España, incluidos hospitales, centros de salud, farmacias y otros servicios sanitarios. La medida entrará en vigor este miércoles, 11 de enero, después de que se comunique a las comunidades autónomas.
La decisión se ha tomado ante el aumento de los casos de COVID-19 y gripe A en el país. El Ministerio de Sanidad recomienda también el uso de mascarilla en otras situaciones, como en aglomeraciones de personas, especialmente en espacios cerrados.
Andalucía aceptará la medida
La consejera de Salud y Consumo de Andalucía, Catalina García, ha asegurado que la comunidad autónoma aceptará la medida de la obligatoriedad de la mascarilla en los centros sanitarios. García ha indicado que desde su departamento «nunca han estado en contra de la obligatoriedad de las mascarillas».
La consejera ha insistido en la importancia de la vacunación
García ha insistido en la importancia de la vacunación para protegerse de las infecciones respiratorias. En Andalucía, la tasa de vacunación contra la COVID-19 es del 40% en mayores de 60 años, del 63% en mayores de 65 años y del 75% en mayores de 85 años.
Recomendaciones para el uso de la mascarilla
El Ministerio de Sanidad recomienda el uso de mascarilla en los siguientes casos:
Interiores de espacios públicos con gran afluencia de personas, como centros comerciales, supermercados, estaciones de transporte, etc.
Eventos multitudinarios, como conciertos, partidos de fútbol, etc.
Lugares donde no se pueda mantener la distancia interpersonal de 1,5 metros.
Caso de tener síntomas compatibles con COVID-19 o gripe.
En el transporte público.
La mascarilla debe cubrir la nariz y la boca, y debe ajustarse bien a la cara. Se recomienda cambiarla cada 4 horas o antes si está húmeda o sucia.
¿Por qué es tan importante el uso de la mascarilla?
El uso de la mascarilla es importante para prevenir la propagación de enfermedades respiratorias, como la COVID-19. Las mascarillas funcionan al bloquear las gotas respiratorias que se producen cuando una persona habla, tose o estornuda. Estas gotas pueden contener el virus que causa la COVID-19, por lo que si una persona que está infectada con el virus usa una mascarilla, puede ayudar a prevenir que transmita el virus a otras personas.
Además de ser eficaz para prevenir la propagación de enfermedades respiratorias, el uso de la mascarilla también puede ayudar a proteger al propio usuario. Si una persona se expone al virus que causa la COVID-19, una mascarilla puede ayudar a reducir la cantidad de virus que inhala. Esto puede ayudar a que la persona se sienta mejor si se enferma y puede reducir el riesgo de que desarrolle una enfermedad grave.
El uso de la mascarilla es especialmente importante en lugares donde hay muchas personas juntas, como en el transporte público, en los lugares de trabajo y en las escuelas. En estos lugares, es más probable que las personas entren en contacto con alguien que esté infectado con el virus.
El uso de la mascarilla es una medida sencilla y eficaz que puede ayudar a proteger a las personas de la COVID-19 y de otras enfermedades respiratorias.
Aquí hay algunos consejos para usar la mascarilla de manera efectiva:
-Asegúrese de que la mascarilla cubra su boca y nariz.
-Ajuste la mascarilla para que quede bien ajustada, pero sin que sea demasiado apretada.
-Cambie la mascarilla si está mojada, sucia o dañada.
-Lávese las manos con frecuencia antes de ponerse y quitarse la mascarilla.
Si tiene alguna pregunta sobre el uso de la mascarilla, consulte a su médico.