Miembros de la Guardia Civil de Tráfico pertenecientes al puesto de San Juan de Aznalfarache, en la provincia de Sevilla, han detenido los ocupantes de un vehículo, un turismo, en cuyo interior transportaba más de un kilo de diferentes sustancias estupefacientes.
Vehículo sospechoso
El conductor del vehículo fue sometido a una prueba de detección de droga, resultando positiva al detectarse la presencia en saliva de cocaína y THC.
En una comunicación por parte del Instituto Armado se ha informado que la detención se produjo como consecuencia de las labores propias de vigilancia en carretera.
Fue cuando una patrulla de la Guardia Civil detectó al conductor de un vehículo, un Volvo S40, que parecía estar conduciendo «totalmente distraído» y pudiendo ser un peligro para la circulación y otros conductores.
Por tal motivo los agentes decidieron dar el alto al conductor así como proceder a la notificación de la infracción cometida, debido a las sospechas que les daba el vehículo se procedió al registro del mismo.
Diferentes sustancias estupefacientes
El vehículo tenía practicado un doble fondo en la trasera del mismo donde había una maleta que contenía trece bolsa de THC, de tetrahidrocannabino o delta-9-tetrahidrocannabinol que es un potente psicoactivo presente en el cannabis. Esta cantidad tenía un peso total de 386,9 gramos.
Demás se encontraron 26 bellotas de hachís de Marruecos (con un peso de 287,90 gramos); cinco pastillas también de hachís ACPHA industries (con un peso de 498 gramos) y una bolsa con otra sustancia estupefaciente como es el cristal.
El conductos es de nacionalidad austriaca residente en España, y el copiloto español afincado en Huelva, ambos fueron detenidos como presuntos autores de un delito contra la Salud Pública, pasando a disposición judicial.
