La Feria de Abril de Sevilla contará este año con una importante novedad en materia de infraestructuras. La tradicional Calle del Infierno, espacio reservado a las atracciones y actividades lúdicas de la fiesta, verá cómo su red eléctrica pasa a estar soterrada, eliminando así uno de los riesgos de seguridad que cada año obligaba a desconectar el tendido durante la celebración.
La intervención será posible gracias a un acuerdo firmado entre la Gerencia Municipal de Urbanismo y la compañía eléctrica Endesa, que asumirá la ejecución de los trabajos. El Ayuntamiento sevillano aportará 230.000 euros a este proyecto, destinado a evitar posibles descargas eléctricas en una zona donde la proximidad entre las atracciones y el cableado aéreo generaba cada año una desconexión preventiva.
La obra, que cuenta con autorización de la Junta de Andalucía desde el verano de 2023, permitirá además suprimir un gasto recurrente para las arcas municipales: los casi 25.000 euros que costaba cada edición el proceso de desconexión y reconexión de la red.
Una inversión compartida para garantizar la seguridad
El plan contempla enterrar la línea de alta tensión que atraviesa la Calle del Infierno, una infraestructura que ya existía antes de que esta parte del recinto ferial acogiera las atracciones. El coste total de la obra asciende a 436.240 euros, que serán financiados al 52% por la Gerencia de Urbanismo y al 48% por Endesa.
El convenio establece que los trabajos deben estar completados antes del inicio de la Feria de 2025, con un plazo máximo de ejecución de 75 días. Durante ese tiempo, el Ayuntamiento se compromete a no realizar intervenciones en el área afectada para evitar interferencias o posibles incidentes.
Fin a un riesgo histórico en el corazón de la Feria
La decisión de soterrar esta línea eléctrica pone fin a una situación que se arrastraba desde hace décadas. Cada mes de abril, el cableado aéreo quedaba sin servicio durante la semana festiva para prevenir accidentes, dado que la escasa distancia entre el tendido y las atracciones suponía un riesgo real para trabajadores y visitantes.
La modernización de la infraestructura eléctrica en el recinto ferial forma parte de un plan más amplio iniciado el año pasado, cuando se estrenó una red específica para las casetas. Aquella actuación, con una inversión conjunta de 3,7 millones de euros, logró reducir los apagones que en ediciones anteriores afectaron a numerosos caseteros.
Un real más seguro y moderno
La transformación de la Feria sigue avanzando para adaptarse a las necesidades actuales sin perder su esencia. En paralelo a las obras eléctricas, en estos días ha comenzado el montaje de las casetas, un trabajo que marca la cuenta atrás hacia la gran cita festiva de Sevilla. La edición de 2025, además, recuperará el formato tradicional, arrancando el lunes con el encendido del alumbrado y cerrando el domingo con los fuegos artificiales.
Con este soterramiento, el real de Los Remedios da un paso más en su proceso de modernización, mejorando la seguridad de uno de sus espacios más concurridos y garantizando una mayor fiabilidad en el suministro eléctrico de la Feria.