Tras un año de paciente restauración, la emblemática Cruz de San Lázaro ha recuperado su esplendor original y ha sido devuelta a su lugar en la histórica Plaza de Santa Marta de Sevilla. Este crucero renacentista, obra maestra de Hernán Ruiz ‘El Joven’ y Diego de Alcaraz, sufrió un acto vandálico en 2023 que dañó gravemente su estructura.
Sin embargo, gracias al trabajo de expertos restauradores, la cruz ha sido cuidadosamente reparada y consolidada, devolviendo a la ciudad una pieza clave de su patrimonio artístico y religioso. A pesar de que la obra ya se encuentra en su emplazamiento original, aún permanece rodeada de andamios, lo que impide a los viandantes apreciar en su totalidad el resultado de esta laboriosa intervención.
La Cruz de San Lázaro, con su valor artístico, se suma a la larga lista de monumentos sevillanos que han sido objeto de actos vandálicos en los últimos años. La Pila del Pato es otro ejemplo de este lamentable fenómeno, habiendo sufrido numerosos robos y actos de vandalismo que han obligado a su restauración en múltiples ocasiones.
Origen de la Cruz
Cabe recordar que la cruz, procedente del antiguo Hospital de San Lázaro y diseñada por el célebre arquitecto Hernán Ruiz ‘El Joven’, era una pieza única que representaba la fe y la devoción de una época. Su iconografía, con un crucificado por una cara y una piedad por la otra, la convertía en un referente artístico y religioso de la ciudad.
Este atentado contra el patrimonio sevillano se suma a una larga lista de actos vandálicos que han afectado a monumentos y obras de arte de incalculable valor histórico y cultural. En los últimos años, la ciudad ha sido testigo de ataques similares, como la profanación de la Cruz de la Inquisición y el robo de la espada del Mercurio, ambos ubicados en el centro histórico.
Estos ataques reiterados ponen de manifiesto la necesidad urgente de reforzar la protección del patrimonio histórico de Sevilla. Es imprescindible concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de preservar nuestro legado cultural y promover medidas más efectivas para prevenir y sancionar estos actos vandálicos, denunciar cualquier acto vandálico que lo ponga en peligro. Asimismo, las administraciones públicas deben redoblar sus esfuerzos para proteger estos tesoros y garantizar su conservación para las futuras generaciones.
La recuperación de la Cruz de San Lázaro es una buena noticia para Sevilla, pero también un recordatorio de la necesidad de seguir trabajando para proteger nuestro patrimonio y garantizar su transmisión a las generaciones venideras.
