La AP-4 Sevilla-Cádiz, se ahoga en atascos con fines de semana de retenciones kilométricas
En la A-49, que sirve para conectar Sevilla con Huelva y su litoral, se habilitó un tercer carril en sentido contrario que está permitiendo mantener la fluidez pese a pequeños incidentes.
La autopista AP-4 ha vuelto a ser este domingo protagonista de uno de los grandes problemas del verano entre Sevilla y Cádiz como son las retenciones interminables en dirección a la capital gaditana o hispalense, coincidiendo con la ida o la vuelta en el fin de semana a la playa.
El tramo entre Las Cabezas de San Juan y Los Palacios, uno de los más transitados, ha registrado colas de más de 15 kilómetros a lo largo del día, en una imagen que se repite ya casi cada fin de semana del periodo del verano.
Desde media mañana, el tráfico ha sido especialmente denso y, pese a la ausencia de accidentes, la circulación ha estado ralentizada durante prácticamente toda la jornada, en muchos tramos detenida durante minutos.
El regreso masivo de vehículos desde la costa gaditana a Sevilla ha vuelto a saturar esta vía, en lo que se ha convertido en un fenómeno recurrente durante los domingos estivales.
Llamamiento a la precaución desde la DGT pero pocas soluciones para la AP-4
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha llamado a los conductores a extremar la precaución, mantener la distancia de seguridad y evitar maniobras bruscas, dadas las continuas paradas y arranques que se producen en estos tramos congestionados.
Igualmente se recuerda de la importancia de consultar el estado del tráfico en tiempo real y valorar rutas alternativas. Las altas temperaturas, que este domingo superaron los 35 grados en algunos puntos de la AP-4, han hecho aún más incómodo el desplazamiento para miles de conductores atrapados en la vía.
Mientras tanto, el tan anunciado proyecto de ampliación de la autopista sigue sin avances concretos. El trazado del tercer carril en los 34,4 kilómetros entre Dos Hermanas y Las Cabezas continúa en fase de redacción, más de un año después de su adjudicación. Según una respuesta oficial del Gobierno del pasado 13 de mayo, se están estudiando "diversas alternativas de ampliación", pero sin fecha clara de ejecución ni soluciones a corto plazo.
Lo que antes era evitable organizando el regreso en horas valle, que son al mediodía o primera hora de la mañana, ya no garantiza un viaje sin demoras. Las colas se extienden a lo largo del día, y cada vez más conductores optan por salir de madrugada como única manera de evitar hasta 45 minutos de espera en carretera.
El problema tampoco es exclusivo de los domingos. Los viernes por la tarde y los sábados por la mañana, en sentido Cádiz, el tráfico se vuelve denso, lo que evidencia una saturación estructural de esta arteria clave entre Cádiz y Sevilla.
En contraste, la A-49, que sirve para conectar Sevilla con Huelva y su litoral, también sufre en verano, aunque con una respuesta más ágil. La habilitación puntual como recurso de un tercer carril en sentido contrario está permitiendo mantener la fluidez pese a pequeños incidentes.
Así, la AP-4 se afianza como uno de los grandes cuellos de botella del verano entre Sevilla y Cádiz, sin soluciones inmediatas a la vista y con miles de conductores atrapados cada fin de semana en una rutina de atascos, calor y frustración.