Indignación viral en los usuarios de la línea de tren de Dos Hermanas a Sevilla

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La línea de tren que conecta Dos Hermanas y Bellavista en Sevilla ha sido objeto de críticas por parte de los usuarios debido a los retrasos y cancelaciones que se han producido en los últimos días.

Horas para un trayecto de 6 minutos

El pasado 22 de octubre de 2023, la borrasca Bernard causó graves daños en las infraestructuras ferroviarias, lo que provocó la interrupción del servicio en el tramo entre las estaciones de Utrera y Dos Hermanas. La circulación ferroviaria seguía interrumpida ayer lunes por las condiciones meteorológicas que provocaron graves incidencias durante la jornada del domingo por el fuerte temporal de viento y lluvia.

El trayecto entre Dos Hermanas y Bellavista, que normalmente dura 6 minutos, se ha visto afectado por estos problemas, lo que ha provocado retrasos de hasta 3 horas. La situación ha generado malestar entre los usuarios, quienes han expresado su descontento a través de las redes sociales.

Renfe ha recomendado a los viajeros recurrir a «medios alternativos» debido a la interrupción del servicio 1. La compañía ha informado que la interrupción afecta a los servicios de la línea C1 de Cercanías de Sevilla y a los trenes de Media y Larga Distancia que enlazan Cádiz con Sevilla, así como a los servicios Regionales Sevilla-Osuna y Sevilla-Málaga.

Esperamos que las autoridades competentes tomen medidas para solucionar estos problemas y garantizar un servicio ferroviario eficiente y seguro para todos los usuarios.

El hilo viral de una usuaria

Un usuario, Pegri~, denunciaba la situación con un hilo en la red social X (antes Twitter) de esta forma: «Bueno va siendo hora de contar la experiencia del tren de ayer. Cojo en Bellavista, a las 19:48 (con 15min de retraso) el cercanías para Dos Hermanas.

Un trayecto de 6 minutos que resultó de más de 3 horas. A mitad de camino el tren se paró… Y por megafonía sólo dijeron que había un problema en la infraestructura y que «tardaríamos más de lo normal».

A los 30 minutos empieza a haber gente que se enfada, que grita, que da golpes a las puertas. Los trabajadores no dan ninguna respuesta. Al rato… Se va la luz del tren.

Ahí, pese a los nervios mis nuevos amigos y yo vamos tomándonos la situación con humor. Pero no todo el mundo lo lleva así. Un niño de 12/13 años empieza a llorar y tiene un ataque de ansiedad. Un niño pequeño habla por videollamada con su madre. Entonces vemos algo por la ventana… La primera fuga.

Para ese momento eran las 21:15 ya. Llevaba casi hora y media (y yo me subí en la última parada antes de pararse, había gente que llevaba más tiempo) y seguíamos sin información. Los trabajadores seguían sin, no sólo dar soluciones, tampoco dar información. La gente abre puertas».