Un hombre de 40 años ha confesado el asesinato de una mujer en Brenes, tras entregarse voluntariamente en el cuartel de la Guardia Civil de La Rinconada en la mañana de ayer. El sospechoso, de nacionalidad española, reconoció haber apuñalado a la víctima en el cuello mientras se encontraba bajo los efectos de las drogas.
El crimen tuvo lugar en un apartamento de la planta baja del número 28 de la avenida 28 de Febrero, donde residía el presunto homicida desde hacía menos de un año. La víctima, una mujer de nacionalidad brasileña identificada como Joyce L., presentaba una única herida mortal en el cuello. Aún no se ha confirmado su edad exacta, que oscila entre los 28 y los 42 años, según distintas fuentes. Se investiga el motivo por el cual la mujer se encontraba en la vivienda del agresor, sin que hasta el momento se haya podido establecer una relación entre ambos. Una de las hipótesis es que hubieran tenido una cita, sin descartarse la posibilidad de que la víctima ejerciera la prostitución.
El sospechoso no tenía antecedentes penales y, según algunos vecinos, era una persona reservada que apenas interactuaba con el entorno. Una vez que confesó el crimen en el cuartel de la Guardia Civil, se activó un dispositivo policial para verificar los hechos. Al llegar al domicilio, los agentes encontraron el cuerpo sin vida de la mujer en el salón, procediendo de inmediato a la detención del acusado.
La escena del crimen
Desde las primeras horas de la mañana, la Guardia Civil y la Policía Local acordonaron la zona, restringiendo el paso de vehículos y peatones. La inspección de la escena del crimen se prolongó durante toda la mañana, mientras el equipo de Criminalística recopilaba pruebas. Pasado el mediodía, la comisión judicial autorizó el levantamiento del cadáver, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Sevilla para la realización de la autopsia. Las primeras pesquisas forenses indican que la herida fatal fue causada por un arma blanca de grandes dimensiones, aunque aún no se ha confirmado si el arma homicida ha sido recuperada.
El suceso generó gran conmoción en la localidad, donde al principio se especuló sobre la identidad de la víctima. Algunas versiones apuntaban a que se trataba de una empleada de un bar cercano, lo que fue descartado posteriormente cuando la trabajadora se presentó sana y salva en su puesto. El hecho de que la vivienda donde ocurrió el crimen perteneciera al dueño del bar contribuyó a la confusión inicial, aunque este no tenía ninguna relación con el homicidio, limitándose a ser el arrendador del acusado.
Los vecinos describen al presunto asesino como un hombre corpulento y con barba, de trato distante. «Solo lo conozco de vista, nunca hemos cruzado palabra. Ni siquiera saludaba cuando pasaba», relató una vecina de la zona.
Este asesinato se produce exactamente cuatro años después del crimen cometido por José Antonio Sánchez Barriga en la misma localidad, ocurrido el 5 de febrero de 2021. Aquel caso tuvo gran repercusión, ya que Sánchez Barriga, testigo clave en el conocido caso Arny, fue condenado a más de 23 años de prisión tras ser declarado culpable de tres homicidios. El alcalde de Brenes, Jorge Barrera, recordó esta coincidencia al ser consultado por la prensa. Barrera explicó que tuvo conocimiento del asesinato de la mujer brasileña por su padre, vecino de la calle donde ocurrió el crimen, quien alertó del despliegue policial en la zona.
El regidor confirmó que ni la víctima ni el acusado estaban empadronados en Brenes y que este último llevaba aproximadamente «ocho o nueve meses» residiendo en el apartamento donde ocurrieron los hechos. La investigación sigue abierta para esclarecer todos los detalles de este trágico suceso.