La crisis sanitaria provocada por el virus del Nilo Occidental continúa agravándose en Andalucía, con la provincia de Sevilla como epicentro. En las últimas semanas, se ha registrado un nuevo fallecimiento y seis casos más de infección por este virus, lo que eleva el número total de víctimas mortales a siete y pone de manifiesto la gravedad de la situación.
La Consejería de Salud y Consumo ha confirmado que la última víctima mortal, un vecino de Mairena del Aljarafe con patologías previas, falleció a causa del virus del Nilo Occidental. Aunque la Junta ha evitado ofrecer más detalles sobre el caso, este nuevo deceso se suma a las otras seis muertes oficialmente atribuidas al virus y a un séptimo caso en el que el virus fue un factor desencadenante del fallecimiento.
Los otros cinco nuevos casos confirmados se distribuyen entre los municipios sevillanos de Mairena del Aljarafe, Palomares del Río, Aznalcázar, Bollullos de la Mitación y la capital hispalense. Es destacable que, según los estudios epidemiológicos, la mayoría de los contagios se produjeron durante la primera quincena de agosto, lo que sugiere que la actividad del virus podría estar disminuyendo en las últimas semanas.
Un problema de salud pública
La propagación del virus del Nilo Occidental en Sevilla ha generado una gran alarma social y ha puesto de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de prevención y control. Las autoridades sanitarias han intensificado las campañas de vigilancia y control de los mosquitos vectores, así como las acciones de información a la población sobre las medidas de protección individual.
La lucha contra el virus del Nilo Occidental requiere una estrategia a largo plazo que aborde tanto las causas como las consecuencias de esta enfermedad. Es necesario invertir en investigación para desarrollar nuevas herramientas de diagnóstico y tratamiento, así como en la mejora de los sistemas de vigilancia epidemiológica. Además, es fundamental sensibilizar a la población sobre la importancia de adoptar medidas de prevención, como el uso de repelentes, la protección de las viviendas y la eliminación de posibles criaderos de mosquitos.
Nuevos casos del VNO en Sevilla
Se han confirmado casos positivos de VNO en capturas de mosquitos realizadas en Las Cabezas de San Juan. Además, la Estación Biológica de Doñana ha detectado la presencia del virus en mosquitos capturados en el entorno rural de Dehesa de Abajo de La Puebla del Río, lo que evidencia la expansión del virus hacia zonas naturales de gran valor ecológico.
Por otro lado, la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural ha informado de la detección de VNO en equinos de El Pedroso, La Rinconada y Villamanrique de la Condesa. Esta situación pone de manifiesto la importancia de incluir a los animales en los sistemas de vigilancia epidemiológica, ya que pueden actuar como sentinelas de la circulación del virus.
Ante esta situación, las autoridades sanitarias han reforzado las medidas de prevención y control. Se han comunicado a los ayuntamientos afectados las actuaciones necesarias para reducir el riesgo de transmisión del virus a la población, siguiendo las recomendaciones del Programa de vigilancia y control integral de vectores transmisores de Fiebre del Nilo Occidental en Andalucía. Además, se realiza un seguimiento continuo de las acciones de control de mosquitos llevadas a cabo por las empresas contratadas por las Diputaciones de Cádiz y Sevilla.
Es importante recordar que la infección por el virus del Nilo Occidental es una zoonosis transmitida por mosquitos del género Culex. Aunque la mayoría de las infecciones en humanos son asintomáticas, un pequeño porcentaje puede desarrollar enfermedades graves, incluso mortales. Por ello, es fundamental adoptar medidas de prevención, como el uso de repelentes, la protección de las viviendas y la eliminación de posibles criaderos de mosquitos.
La expansión del virus del Nilo Occidental en Sevilla plantea un serio desafío para las autoridades sanitarias y exige una respuesta coordinada y eficaz.