
El colapso del cribado de mama en Andalucía, los técnicos apuntan a una digitalización fallida del SAS
Digitalización fallida y falta de personal, el cóctel que colapsó el cribado de mama en Andalucía

El Sindicato Nacional de Técnicos Sanitarios (TECNOS) ha lanzado una dura denuncia contra el Servicio Andaluz de Salud (SAS) por lo que califican como un “fallo evitable” en el sistema de detección precoz del cáncer de mama.
Según el sindicato, la combinación de una “digitalización mal planificada” y la escasez de Técnicos Superiores Sanitarios (TSS) ha provocado un auténtico caos y colapso en el seguimiento de los cribados mamográficos, dejando en suspenso centenares de revisiones en hospitales andaluces.
El escrito, firmado por el secretario general Joaquín Cano Medina, fue remitido al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y a la Consejería de Salud, a quienes acusan de “gestión opaca, negligente e insensible”.
El sindicato sostiene que la Administración ignoró los avisos reiterados del personal técnico, que venía alertando desde hace meses del deterioro progresivo del sistema.
El fallo digital que paralizó los cribados del SAS
La digitalización del seguimiento de los cribados mamográficos, impulsada por el SAS con el objetivo de modernizar los procesos, se habría convertido en el principal detonante de la crisis. Según TECNOS, el nuevo sistema informático, implantado “sin soporte técnico ni facultativo suficiente”, ha saturado en extremo la plataforma digital donde se almacenan los informes clínicos.
Con la eliminación total de los registros en papel, la nube del SAS habría llegado a un punto de congestión que impide subir nuevos informes técnicos. Este bloqueo, unido a la falta de radiólogos para validar los estudios pendientes, habría generado un “efecto dominó” que ralentiza mucho la atención a miles de mujeres.
“Desde hace años se eliminaron los informes en papel, lo que ha provocado que la nube se colapse ante la imposibilidad de liberar espacio por falta de radiólogos que validen los informes. Este error es una de las causas directas del colapso actual”, indica el sindicato en su queja.
A la crisis digital se suma la escasez de técnicos de Imagen para el Diagnóstico y Medicina Nuclear (TSIDyMN), los únicos habilitados para realizar mamografías.
TECNOS denuncia que en varias provincias andaluzas permanecen cerradas salas de mamografía por la tarde por la carencia de personal, especialmente en el Hospital Infanta Elena (Huelva) y en el Virgen del Rocío (Sevilla).
En algunos centros, incluso, se han instalado nuevos equipos de TAC y mamografía que no pueden ponerse en marcha por carencia de plantilla. “Se está derivando actividad a la sanidad privada mientras los equipos públicos están sin uso. Es el reflejo de un sistema que se hunde por falta de previsión”, lamentan desde el sindicato.
“Maltrato institucional” y pérdida de reconocimiento profesional
El malestar de los técnicos no se limita a los fallos operativos. En su comunicado, TECNOS acusa directamente a la Administración de un “trato vejatorio y humillante”, especialmente tras haber sido catalogados oficialmente como “personal auxiliar de radiología”, una denominación que consideran ofensiva y errónea.
Para el sindicato, esta decisión muestra un “desconocimiento total del presidente andaluz sobre la estructura sanitaria”, y supone un golpe simbólico a la labor de un colectivo esencial en la detección temprana del cáncer.
Además, TECNOS denuncia un “silencio administrativo prolongado” por parte de la Dirección General de Personal del SAS, dirigida por José Luis Sedeño, que —afirman— no ha respondido a las numerosas solicitudes de reunión ni ha ofrecido soluciones.
El sindicato reclama medidas inmediatas y urgentes como la contratación urgente de técnicos, la revisión integral del sistema digital de cribado y una rectificación pública del Gobierno andaluz por el trato recibido.
“No es un simple error informático, es el reflejo de un modelo sanitario que ha perdido el contacto con quienes sostienen su día a día”, finalizan desde TECNOS.
Mientras tanto, los profesionales técnicos advierten que el colapso del cribado mamográfico amenaza con retrasar diagnósticos clave en la lucha contra el cáncer de mama, una enfermedad donde cada semana de demora puede marcar la diferencia entre un tratamiento curativo o paliativo.