El naranjo, un símbolo de Sevilla, podría tener una presencia más equilibrada en la ciudad. Así lo recomienda el Plan Director del Arbolado de Sevilla, elaborado por la Delegación de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Sevilla.
¿Por qué este cambio?
Excesiva presencia: Actualmente, el naranjo representa el 33% de las especies en el viario y el 11% en las zonas verdes. El objetivo del Plan es que ninguna especie supere el 5% de la población arbórea del municipio.
Monocultivo: El exceso de naranjos crea un monocultivo que limita la biodiversidad y puede afectar la salud del arbolado en general.
Cambio climático: Algunas especies, como el naranjo, son más sensibles al cambio climático. Diversificar el arbolado ayuda a la ciudad a adaptarse a sus efectos.
¿Qué se propone?
Restringir el uso del naranjo amargo (Citrus aurantium) a reposiciones en conjuntos arbolados existentes.
Evitar nuevas plantaciones de naranjos, salvo por razones técnicas específicas.
Sustituir calles completas de naranjos donde las condiciones no sean las deseables.
Alternar naranjos con otras especies en las alineaciones.
Plantar nuevas especies para llegar a 80 especies diferentes por distrito en el arbolado viario y 110 en zonas verdes.
¿Dónde se conservarán los naranjos?
Zonas monumentales: La presencia del naranjo se mantendrá en zonas como las plazas Virgen de los Reyes, San Francisco y del Triunfo, y calles aledañas a la Catedral.
Lugares emblemáticos: Se conservarán en lugares donde el naranjo forma parte de la identidad cultural y paisajística de la ciudad.
El Plan Director del Arbolado busca conciliar la tradición del naranjo con la necesidad de un arbolado más diverso y resiliente. Se trata de preservar la belleza y el aroma del naranjo en lugares emblemáticos, al tiempo que se abre paso a nuevas especies que enriquezcan el patrimonio natural de la ciudad y la preparen para los desafíos del cambio climático.
Plantación de árboles en Sevilla: calidad sobre cantidad
La estrategia de Parques y Jardines en Sevilla para aumentar la cobertura arbórea de la ciudad se basa en tres principios clave:
1. Selección estratégica de especies:
No se trata de llenar las calles de árboles sin criterio, sino de elegir cuidadosamente las especies que mejor se adapten a cada zona, tanto en su desarrollo natural (altura y raíces) como en sus necesidades de luz y suelo.
Se priorizará la plantación de árboles que proporcionen la mayor cobertura de sombra posible, minimizando las interferencias con otros servicios públicos y la vida cotidiana de los ciudadanos.
2. Aprovechamiento de espacios existentes:
En lugar de crear nuevos alcorques (huecos para árboles), se dará prioridad a la apertura de alcorques en calles que actualmente carecen de sombra. Esto permitirá optimizar el espacio disponible y maximizar el impacto positivo de los árboles.
3. Reducción del monocultivo:
Si bien el naranjo es un símbolo de Sevilla, su presencia excesiva en el arbolado urbano genera problemas como la caída de frutos, la dificultad de su recogida y la limitación de la biodiversidad.
Se buscará un equilibrio entre la conservación del patrimonio cultural que representa el naranjo y la necesidad de diversificar las especies arbóreas, plantando nuevas variedades que enriquezcan el ecosistema urbano.
Otras objetivos del Ayuntamiento de Sevilla
Reducir el número de alcorques vacíos: Se pretende disminuir al 3% el porcentaje de alcorques sin árboles, optimizando los recursos y asegurando una distribución más equitativa de la cobertura arbórea.
Ahorrar en la recogida de naranjas: Al controlar el crecimiento de naranjos, se minimizará la cantidad de frutos que caen al suelo, reduciendo así los costes de recogida y mejorando la limpieza de las calles.
Promover la diversidad arbórea: Se plantarán nuevas especies o se aumentará la presencia de aquellas que actualmente están poco representadas, creando un arbolado urbano más rico y resiliente.
La estrategia de Parques y Jardines para la plantación de árboles en Sevilla no se centra en la cantidad, sino en la calidad. Se busca crear un arbolado urbano más eficiente, diverso y adaptado a las necesidades de la ciudad y sus habitantes.
