Un hombre de Sevilla ha sido detenido por su presunta implicación en una estafa que ha afectado a una veintena de jóvenes. El arrestado, que podría haberse embolsado unos 33.000 euros, se aprovechaba de la vulnerabilidad de sus víctimas, que en la mayoría de los casos no tenían más de 18 años.
Forma de actuar
El modus operandi del estafador era el siguiente: contactaba con sus víctimas a través de una conocida red social y les ofrecía la posibilidad de ganar 50 euros de forma «rápida y sencilla». Una vez que captaba su atención, les indicaba cómo solicitar un préstamo personal a través de una entidad de crédito rápido por importe de 300 euros. Las víctimas debían transferir 250 euros a personas que el estafador les indicaba, lo que les generaba un beneficio de 50 euros.
En una segunda fase, el estafador solicitaba a sus víctimas las claves de acceso a la aplicación de préstamo rápido con la excusa de borrar los datos para así evitarles hacer frente a las cuotas del mismo. Sin embargo, usaba esos datos para solicitar nuevos créditos por un importe de 900 euros, especificando a qué cuentas ingresarlo.
Una vez que disponía de todos los datos personales de las víctimas, les instaba a seguir obedeciendo sus indicaciones obligándoles a solicitar nuevos préstamos o transfiriéndole dinero bajo la amenaza de causarles daños físicos a ellos o a sus familiares.
La Policía Nacional ha puesto fin a la actividad delictiva de este estafador, que ha conseguido un beneficio económico de alrededor de 33.000 euros en apenas dos meses.
Cuidado con las estafas en internet
Internet es una herramienta muy útil que nos permite comunicarnos con personas de todo el mundo, realizar compras, acceder a información y mucho más. Sin embargo, también es un lugar donde abundan las estafas.
Las estafas en internet son delitos que se cometen a través de internet, con el objetivo de defraudar a las víctimas. Pueden adoptar muchas formas, como:
Estafas piramidales:
Se basan en la promesa de obtener grandes beneficios económicos a cambio de reclutar a nuevos miembros.
Estafas de falso sorteo o concurso:
Ofrecen premios atractivos a cambio de datos personales o dinero.
Estafas de phishing:
Se envían correos electrónicos o mensajes fraudulentos que parecen proceder de empresas o instituciones de confianza, con el objetivo de engañar a las víctimas para que revelen sus datos personales o bancarios.
Estafas de suplantación de identidad:
Se utilizan los datos personales de una persona para realizar compras o transacciones en su nombre.
