La Guardia Civil de Osuna ha desarticulado una peligrosa red criminal dedicada a la extorsión a través del conocido modus operandi del «hijo en apuros». En el marco de la Operación Dragore, iniciada en junio de 2023 a raíz de la denuncia de un vecino de Osuna, se ha logrado identificar y detener a cuatro individuos presuntamente implicados en estos hechos delictivos.
La investigación se inició cuando la víctima, un residente de Osuna, denunció haber sido contactado por tres hombres procedentes de Granada, quienes, bajo la falsa premisa de ofrecerle un empleo, urdieron un elaborado plan para despojarle de su dinero. Durante una reunión en un parque de la localidad, los estafadores propusieron a la víctima un lucrativo negocio que consistía en recibir transferencias bancarias en su cuenta y, a cambio, realizar una serie de operaciones financieras, como transferencias a otras cuentas y extracciones de efectivo.
Sin embargo, la oferta encubría una trama mucho más siniestra. Ante la negativa inicial de la víctima, los estafadores recurrieron a la intimidación y la violencia, arrebatándole el teléfono móvil y amenazándole con difundir imágenes privadas. Amedrentado, el afectado accedió a proporcionar sus claves bancarias, cayendo así en la trampa de los delincuentes.
A lo largo de la investigación, se ha podido constatar cómo los estafadores realizaron un total de tres transferencias bancarias a la cuenta de la víctima, por un importe superior a los 3.800 euros. Posteriormente, mediante coacciones y amenazas, obligaron a la víctima a realizar diversas operaciones de Bizum a cuentas controladas por los miembros de la organización criminal.
La Guardia Civil ha detenido a los cuatro presuntos autores de estos hechos, imputándoles delitos de extorsión, estafa y blanqueo de capitales. Esta operación ha puesto de manifiesto la peligrosidad de este tipo de delitos, que se aprovechan de la confianza y la buena fe de las víctimas para obtener un beneficio económico ilícito.
La red desmantelada operaba a escala nacional
La meticulosa investigación llevada a cabo por la Guardia Civil de Osuna ha revelado una compleja trama delictiva que se extendía más allá de los límites de la provincia de Sevilla. El seguimiento del dinero transferido a la cuenta de la víctima de Osuna condujo a un sorprendente hallazgo: las transferencias provenían de dos personas que habían sido estafadas con el mismo modus operandi en localidades tan distantes como Galapagar (Madrid) y Villarreal (Castellón).
En todos los casos, los estafadores emplearon la conocida técnica del «hijo en apuros». A través de plataformas de mensajería instantánea, se hacían pasar por familiares en apuros, urgiendo a sus víctimas a realizar transferencias bancarias inmediatas para solventar supuestos problemas económicos o situaciones de emergencia. La credibilidad y el pánico generados por estos mensajes fraudulentos llevaban a las víctimas a transferir grandes sumas de dinero a las cuentas bancarias controladas por los delincuentes.
Gracias a la colaboración entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, se logró identificar a los presuntos autores de estas estafas. Mediante exhaustivas labores de investigación, análisis de las cuentas bancarias involucradas y reconocimientos fotográficos por parte de las víctimas, se pudo establecer la identidad de cuatro individuos, tres de ellos residentes en la provincia de Granada y uno en Osuna. Estos sujetos fueron puestos bajo investigación por delitos de extorsión, estafa y blanqueo de capitales.