Las Urgencias del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla se encuentran en el centro de la polémica tras las denuncias del sindicato de enfermería Satse, que alerta de esperas superiores a las 60 horas para acceder a una cama hospitalaria. Según el sindicato, la situación pone en riesgo la seguridad de los pacientes y refleja una falta de acción por parte del Servicio Andaluz de Salud (SAS).
Satse asegura que la Unidad de Observación del Hospital General, diseñada para atender a un máximo de 30 pacientes, se encuentra desbordada, llegando a registrar hasta 32 pacientes en sus instalaciones. Además, el sindicato denuncia que pacientes con respiradores asistidos están siendo ubicados fuera de las Unidades de Cuidados Críticos, lo que consideran una amenaza a su seguridad.
El problema, según el sindicato, radica en la negativa del SAS a activar el Plan de Alta Frecuentación en su totalidad, una medida que permitiría contratar más personal sanitario y abrir camas actualmente cerradas. Entre los ejemplos citados, destaca el caso de la séptima planta del Hospital Muñoz Cariñanos, completamente cerrada pese a la alta demanda, y la reserva de una planta de Maternidad del Virgen del Rocío para dormitorios individuales de médicos.
Por otro lado, el hospital rechaza las acusaciones y asegura que el Plan de Alta Frecuentación está activo desde octubre en su fase inicial. Según fuentes oficiales, las asistencias en Urgencias descendieron un 7,85% la semana pasada, y destacan la incorporación reciente de siete enfermeras, seis técnicos auxiliares de cuidados de enfermería (TCAE) y tres celadores en el Hospital Muñoz Cariñanos, lo que ha permitido habilitar nueve camas adicionales.
Desde la dirección del Virgen del Rocío insisten en que no existe saturación, sino “estabilidad” dentro de un periodo del año que puede presentar picos de presión asistencial. Además, agradecen el esfuerzo del personal sanitario, al que califican como clave para garantizar la atención ciudadana.
Sin embargo, Satse recalca que las urgencias atendieron el año pasado 4.325 pacientes más que en 2023 sin ningún aumento en la plantilla de enfermería, lo que agrava la situación. Según el sindicato, muchos pacientes llegan con patologías más graves debido a la falta de atención en otros niveles asistenciales.
Dimisión del gerente del hospital
El conflicto coincide con la dimisión de Manuel Molina Muñoz, gerente del Virgen del Rocío desde 2019, quien anunció su salida la semana pasada alegando motivos personales y a pocos días de su jubilación. La Consejería de Salud y Consumo ha calificado la renuncia como un relevo “normal” dentro de los procesos directivos. Molina permanecerá en el cargo hasta el 31 de enero, cuando se abrirá una convocatoria pública para su sustitución.
El Virgen del Rocío, el mayor hospital público de Andalucía, afronta así un periodo de cambios mientras se busca una solución a las tensiones generadas por la saturación en su servicio de Urgencias.