Dos paracaidistas, David Laffargue y Paul Rbd, conocidos por sus saltos BASE en lugares emblemáticos, han sido denunciados por la Junta de Andalucía tras saltar desde el cohete Ariane 4 del antiguo Pabellón del Futuro de la Expo 92.
La acción, grabada y compartida en redes sociales, generó controversia. La Junta, propietaria y responsable de la seguridad del cohete, ha presentado una denuncia por allanamiento de morada, daños y desorden público. Los deportistas, que accedieron al recinto rompiendo un candado y forzando una puerta, completaron el salto en menos de cinco minutos con ayuda de un dron y un amigo.
Laffargue y Rbd, con experiencia en saltos desde el Cristo del Corcovado o la Basílica del Sacre Coeur, podrían enfrentar multas o sanciones administrativas.
Un gigante de metal con historia: El Ariane 4 de la Expo 92
En la Isla de la Cartuja se alza un gigante de metal: la réplica del cohete Ariane 4. Con sus más de 30 toneladas de peso y 60 metros de altura, este símbolo de la Expo 92 sigue llamando la atención casi 32 años después de la Exposición Universal.
Más que una simple maqueta, este coloso de metal guarda en su interior una historia fascinante. Construida con la misma maqueta que Arianespace utilizó para fabricar el cohete real que enviaría al espacio el primer satélite español, el Hispasat, la réplica del Ariane 4 se convirtió en un emblema del avance tecnológico y la ambición espacial de España.
Concebida como un faro del futuro, la imponente estructura del cohete invitaba a los visitantes de la Expo 92 a soñar con la conquista del espacio. Hoy en día, sigue siendo un punto de referencia en la Cartuja, un recordatorio tangible de un evento que marcó un antes y un después en la ciudad.
Más allá de su valor histórico, la réplica del Ariane 4 es una obra de ingeniería admirable. Su construcción a escala real, con un detalle meticuloso, la convierte en una pieza única y un atractivo turístico para quienes visitan Sevilla.
¿Qué riesgo tiene saltar en paracaídas desde la réplica de este cohete en la Isla de la Cartuja de Sevilla?
Riesgos de saltar en paracaídas desde la réplica del cohete Ariane 4 en la Isla de la Cartuja de Sevilla:
Saltar en paracaídas desde cualquier estructura no diseñada para ello conlleva un alto riesgo. En el caso de la réplica del cohete Ariane 4 en la Isla de la Cartuja de Sevilla, estos riesgos se intensifican por varios motivos:
1. Altura: La estructura tiene 60 metros de altura, lo que significa que el tiempo de caída libre es corto y el margen para corregir errores es mínimo. Un fallo en la apertura del paracaídas o un error en la maniobra de aterrizaje puede tener consecuencias fatales.
2. Obstáculos: El entorno del cohete presenta varios obstáculos, como cables de alta tensión, edificios y árboles, que podrían impactarse durante el salto o el aterrizaje.
3. Seguridad: La zona no está habilitada para saltos en paracaídas, por lo que no hay medidas de seguridad como redes de protección o personal especializado en caso de emergencia.
4. Legalidad: Saltar en paracaídas desde la réplica del cohete Ariane 4 sin autorización es ilegal y puede conllevar multas o incluso penas de cárcel.
Saltar en paracaídas desde la réplica del cohete Ariane 4 en la Isla de la Cartuja de Sevilla es una actividad extremadamente peligrosa y desaconsejable. Los riesgos de sufrir un accidente grave o incluso fatal son demasiado altos.
