CSIF Tussam critica la paradoja del alcalde de Sevilla al recomendar el teletrabajo ante el caos de movilidad

El sindicato acusa al Ayuntamiento de incoherencia y de intentar encubrir los problemas estructurales de movilidad que sufre la ciudad a diario

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Vehículo de Tussam.
Autobús de Tussam.

Sevilla se prepara para acoger en los próximos días una importante cumbre de la ONU, un evento internacional que atraerá a cientos de delegaciones y visitantes y que, previsiblemente, agravará los ya habituales problemas de tráfico en la ciudad. Ante esta situación, el alcalde hispalense, José Luis Sanz, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía y a las empresas para que fomenten el teletrabajo durante los días del evento, con el objetivo de reducir la presión sobre las vías urbanas y facilitar los desplazamientos esenciales.

Sin embargo, esta recomendación ha despertado fuertes críticas desde la sección sindical de CSIF en Tussam, que ha calificado la propuesta de “paradoja” y ha acusado al primer edil de “incoherencia”. Según denuncian desde el sindicato, llevan años solicitando sin éxito la implantación del teletrabajo en determinadas áreas de la empresa municipal de transportes, donde su aplicación sería viable y beneficiosa tanto para los trabajadores como para el servicio público. “Hemos negociado esta posibilidad durante los dos últimos convenios y siempre nos hemos encontrado con una negativa tajante por parte de la dirección”, aseguran los representantes sindicales.

Desde CSIF consideran que la recomendación del alcalde no responde a un compromiso real con la modernización del modelo laboral ni con la sostenibilidad, sino a un intento de aplicar una medida de urgencia para evitar el colapso de la ciudad durante un evento puntual. “Lo que se nos niega como política estructural, se presenta ahora como solución improvisada frente a una crisis de movilidad que, en realidad, sufrimos a diario en Sevilla”, critican.

Incoherencias del alcalde de Sevilla y el teletrabajo

Además, el sindicato recuerda que el teletrabajo, correctamente implementado, no solo permitiría mejorar la conciliación laboral y familiar de muchos empleados públicos, sino que también tendría un impacto positivo directo sobre la movilidad urbana, al reducir la necesidad de desplazamientos diarios en vehículo privado o transporte público. Esta medida, subrayan, contribuiría a aliviar los problemas de tráfico, a disminuir las emisiones contaminantes y a apoyar los objetivos medioambientales que el propio Ayuntamiento proclama en sus discursos institucionales.

“Resulta contradictorio que se utilice el argumento de la movilidad y del medio ambiente solo cuando hay una cumbre internacional en juego, mientras que se desatienden de forma sistemática nuestras propuestas para mejorar el funcionamiento interno de Tussam y adaptarnos a los tiempos”, insisten desde CSIF.

En su comunicado, el sindicato también aprovecha para denunciar que Tussam, la empresa pública de transporte que gestiona buena parte de la movilidad en Sevilla, sigue arrastrando importantes carencias. Según los responsables sindicales, la compañía “se encuentra a la cola en cuanto a derechos laborales, calidad del servicio y actualización tecnológica”, lo cual consideran especialmente grave en una ciudad con la proyección internacional y la densidad poblacional de la capital andaluza.

Para CSIF, la situación pone de relieve una doble vara de medir: mientras se exigen sacrificios y adaptaciones a los ciudadanos en momentos críticos, no se aplican las mismas exigencias dentro de las estructuras administrativas que deberían liderar con el ejemplo. En este contexto, reclaman al equipo de gobierno municipal una política más coherente, con compromisos reales y sostenidos en el tiempo que no dependan de la presión de grandes eventos para ser considerados.

Finalmente, el sindicato concluye que si el teletrabajo es útil para descongestionar la ciudad durante la celebración de una cumbre internacional, también debería serlo como herramienta permanente para mejorar la eficiencia de los servicios públicos y reducir el impacto ambiental del modelo laboral tradicional. “No se puede improvisar en materia de movilidad y sostenibilidad. Sevilla necesita políticas estructurales, no parches temporales”, sentencian.