Crecen en Sevilla los casos de gripe, gripe A, COVID y bronquiolitis

Con la colaboración de todos, será posible mitigar el impacto de este complicado panorama epidemiológico

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Jeringuilla con vacuna contra la gripe.
La vacunación es la mejor forma de evitar la gripe.

El invierno trae consigo el aumento de enfermedades respiratorias, y este año no es la excepción. Según el Centro Nacional de Epidemiología, se ha registrado un incremento significativo en la incidencia de gripe, COVID-19 y bronquiolitis, situando la tasa de infecciones en 596 casos por cada 100.000 habitantes. Los expertos pronostican que el pico máximo de estas enfermedades llegará dentro de dos semanas, lo que ha encendido las alarmas en el sistema sanitario.

Ante esta situación, la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) ha instado a los servicios de salud a preparar planes de contingencia para enfrentar la creciente presión sobre los sistemas de atención primaria y hospitalaria. Entre las medidas propuestas, se destacan la necesidad de reforzar la vacunación contra la gripe, el COVID-19 y el virus respiratorio sincitial (VRS), especialmente en personas de riesgo como ancianos, niños pequeños y aquellos con enfermedades crónicas.

Además, el informe de la SEMG hace hincapié en la importancia de implementar estrategias de prevención y control de infecciones en centros de atención sanitaria y residencias, junto con un monitoreo estricto de casos atípicos o graves de estas enfermedades respiratorias.

El impacto del frío y las reuniones festivas

El frío invernal, sumado a las reuniones y viajes propios de la temporada navideña, ha contribuido al aumento en la transmisión de estos virus. Los síntomas como fiebre, congestión nasal, tos y escalofríos se están volviendo comunes, afectando a personas de todas las edades.

Guipúzcoa, en el País Vasco, destaca por un incremento del 30% en los casos de gripe, reflejo de una tendencia que también afecta a otras regiones del país. Los hospitales reportan un aumento en las tasas de positividad del VRS, alcanzando el 19,7%, mientras que la gripe registra un 6,2% en atención primaria, cifras que continúan en ascenso.

Casos de gripe A y sus implicaciones

En este contexto, se ha observado un resurgimiento de la gripe A, con brotes que han llevado a hospitalizaciones, especialmente en personas jóvenes y adultos mayores. Este subtipo del virus influenza sigue siendo una preocupación debido a su capacidad de generar complicaciones graves en poblaciones vulnerables.

Los expertos advierten que la co-circulación de múltiples virus respiratorios, incluida la gripe A, está ejerciendo una presión sin precedentes sobre los servicios de salud. En algunos casos, las hospitalizaciones no solo afectan a los más pequeños, sino también a adultos mayores que presentan cuadros complejos de coinfección con otros virus como el VRS o el COVID-19.

La vacunación y a la responsabilidad individual

Ante este panorama, las autoridades sanitarias reiteran el llamamiento a la población para que se vacune y adopte medidas de autocuidado, como el uso de mascarillas en lugares concurridos, el lavado frecuente de manos y evitar acudir a reuniones si presentan síntomas. Estas acciones no solo protegen a quienes las practican, sino que también ayudan a reducir la transmisión y aliviar la carga sobre el sistema de salud.

La temporada invernal está en pleno apogeo, y el aumento de casos de enfermedades respiratorias exige tanto preparación por parte de los servicios sanitarios como responsabilidad por parte de las personas. Con la colaboración de todos, será posible mitigar el impacto de este complicado panorama epidemiológico.