Las obras en Sevilla dificultan el tráfico, calle con vallas y señalización de obras.
Calle cortada por obras.

Caos circulatorio en el centro de Sevilla por cortes simultáneos en Méndez Núñez y Cuesta del Rosario

Muchos conductores se han visto obligados a hacer giros indebidos o han terminado atrapados en calles sin salida

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El casco histórico de Sevilla vive días de auténtico colapso circulatorio debido a la "coincidencia" de cortes por obras en dos puntos neurálgicos del casco histórico como son en la calle Méndez Núñez y la Cuesta del Rosario, en la zona de la Alfalfa. El resultado ha sido un cóctel de atascos, desinformación y multas que ha puesto a prueba la paciencia de conductores, transportistas y vecinos.

Desde primera hora del lunes, el corte parcial de Méndez Núñez por trabajos de mejora ha generado un importante desvío de tráfico hacia la Plaza Nueva, donde una señalización confusa ha provocado numerosas situaciones de caos.

Muchos conductores se han visto obligados a hacer giros indebidos o han terminado atrapados en calles sin salida. La falta de indicaciones más esclarecedoras ha derivado en sanciones a transportistas que, sin alternativas visibles, han optado por circular por zonas restringidas.

La situación se agrava al coincidir con el cierre también de la Cuesta del Rosario, una de las vías de escape habituales del centro hacia Menéndez Pelayo. Con esta arteria bloqueada, los desvíos naturales del tráfico se han visto colapsados y muchos accesos a zonas como la Alfalfa, Francos o Jesús de las Tres Caídas han quedado prácticamente intransitables.

Parking y accesos al centro de Sevilla

En puntos como la calle Jaén y la calle Albareda, que dan acceso a varios parkings, la situación se ha vuelto insostenible. El aparcamiento de motos invade parte del carril, impidiendo un flujo en doble sentido que podría aliviar los embotellamientos.

Algunos conductores han quedado atrapados intentando incorporarse a Méndez Núñez, sin señalización visible de que la vía estaba cortada, teniendo que ser rescatados por operarios que han tenido que mover las vallas de obra para dejarlos salir.

La Policía Local ha tenido que intervenir para poner algo de orden tras horas de absoluto descontrol. A mediodía del lunes comenzaron a instalarse nuevas señalizaciones provisionales, incluso improvisadas, como una hoja grapada a un árbol indicando dirección obligatoria. También se ha destinado personal de obra para actuar como agentes de tráfico improvisados.

Para paliar la situación, el Ayuntamiento ha anunciado varias medidas urgentes como son el convertir en doble sentido las calles Jaén y el acceso desde Plaza Nueva a los aparcamientos de Albareda, y retirar el aparcamiento de motos que impide la circulación. Estas medidas, previstas para implantarse a lo largo del martes, buscan evitar que se repita el despropósito vivido el lunes.

Vecinos y conductores reclaman una planificación más coherente de las obras en el centro de Sevilla, especialmente cuando afectan a varias calles clave a la vez. La falta de coordinación y señalización ha dejado claro que el diseño actual del tráfico en el casco histórico es extremadamente vulnerable a cualquier alteración. La movilidad, aseguran, no puede quedar al albur de señales mal colocadas y folios grapados.