
Así será la aurora boreal visible desde Andalucía, en Sevilla y Cádiz: fechas y lugares clave
España se prepara para un fenómeno único: la aurora boreal podría verse incluso en el sur

El cielo español y el andaluz en particular vuelve a ser escenario de un fenómeno excepcional. Una aurora boreal —extraordinario espectáculo de luces que suele reservarse a los confines del Círculo Polar Ártico— podría teñir de verde y violeta algunas regiones del país, incluyendo zonas de Andalucía, Galicia, Zaragoza y Cataluña.
Según los astrónomos, entre los días 20 y 29 de octubre de 2025 las condiciones serán especialmente buenas y propicias para que el llamado óvalo auroral se extienda hacia el sur de Europa, un suceso que no se repetía desde mayo de 2024.
La aurora boreal es el resultado visible de una interacción entre el Sol y la Tierra. Ocurre cuando partículas cargadas procedentes del astro rey —que son liberadas durante las eyecciones de masa coronal— chocan con el campo magnético terrestre.
Al encontrarse con moléculas de oxígeno y nitrógeno en la atmósfera superior, se genera una descarga de energía que se traduce en luces ondulantes que varían entre el verde, el magenta o el púrpura.
El color de estas luces depende de la altitud y del tipo de gas atmosférico que interviene. Así, el oxígeno produce unas tonalidades verdes o rojas, mientras que el nitrógeno genera destellos azulados o violetas. Las auroras son un recordatorio visible del vínculo constante entre nuestro planeta y el espacio exterior.
Sevilla y Andalucía, puntos privilegiados
Las predicciones de los observatorios solares internacionales apuntan a un incremento del índice Kp —la escala que mide la actividad geomagnética— que podría alcanzar valores de hasta 6, suficientes para permitir que las auroras sean visibles desde latitudes inusualmente bajas.
En Andalucía, las mejores opciones se concentran en las zonas montañosas del norte de Cádiz y sur de la provincia de Sevilla, donde la altitud y la escasa contaminación lumínica favorecen la observación.
También en Galicia, especialmente en la costa de A Mariña lucense, se espera un cielo más oscuro y estable. En Zaragoza, el valle del Ebro y las áreas rurales serán puntos idóneos para la observación, mientras que en Cataluña, la costa y el Prepirineo podrían ofrecer una experiencia inolvidable si la nubosidad lo permite.
Aunque las previsiones se centran en estas regiones, otras zonas del norte, como Castilla y León o Navarra, no están descartadas. La naturaleza caprichosa del fenómeno hace que las probabilidades varíen con las horas y las condiciones atmosféricas.
España ha vivido muy pocos encuentros con este fenómeno. El último, en mayo del año 2024, dejó imágenes virales desde la sierra de Guadarrama y León, cuando una tormenta solar sin precedentes provocó auroras visibles incluso en el centro de la península.
Antes de ese suceso, los registros históricos de auroras boreales en España eran escasos y dispersos, con testimonios documentados durante el siglo XX pero sin el respaldo de herramientas de predicción modernas.
Hoy, gracias al desarrollo tecnológico y al auge del interés por la astronomía, miles de personas siguen en tiempo real las alertas que emiten agencias y observatorios internacionales.
Ver una aurora boreal en España es posible, pero requiere paciencia, planificación y algo de suerte. Los expertos recomiendan alejarse de las grandes ciudades para evitar la contaminación lumínica, buscar miradores elevados, parques naturales o playas solitarias, y consultar regularmente las predicciones del índice Kp y los mapas de nubosidad.
Las mejores horas para la observación son entre la medianoche y las tres de la madrugada, cuando la oscuridad es más profunda y la actividad solar alcanza su punto máximo. Plataformas como la AEMET o las aplicaciones especializadas en astronomía ofrecen actualizaciones constantes sobre las condiciones del cielo.
Más allá del rigor científico, la llegada de una aurora boreal al sur de Europa es también un acontecimiento casi único. Contemplar luces danzando sobre el cielo andaluz o gallego es una experiencia que trasciende lo astronómico: es una forma de recordar nuestra conexión con el universo y con los ciclos naturales que aún determinan la vida en la Tierra.
Este octubre, si las predicciones se cumplen, los españoles tendrán la oportunidad de levantar la vista y descubrir un espectáculo que pocas generaciones han tenido la suerte de presenciar. Porque a veces, incluso en los cielos más familiares, la naturaleza se reserva un instante de magia.