La Iglesia Colegial del Divino Salvador, ubicada en la plaza del mismo nombre en Sevilla, se alza como un imponente testigo del rico pasado de la ciudad. Su historia se remonta a la época romana, cuando en este solar se erigía un templo que, con el paso del tiempo, albergaría diferentes cultos y estilos arquitectónicos.
Tras la conquista de Sevilla por Fernando III en 1248, la mezquita de Ibn Adabbás, construida en el siglo IX, fue consagrada como iglesia cristiana bajo la advocación del Divino Salvador del Mundo. En el siglo XV, adquirió la categoría de colegiata, un rango que le otorgó mayor prestigio e importancia.
El paso del tiempo y el deterioro del edificio impulsaron una profunda remodelación en el siglo XVII. En 1671 se inició la construcción de un nuevo templo bajo el diseño del arquitecto José Granados de la Barrera. Las obras, que se prolongaron durante varias décadas, culminaron en 1712 con la finalización de la cúpula y la decoración interior.
El campanario de la Iglesia Colegial del Divino Salvador es una obra maestra que combina elementos de diferentes épocas y culturas. Su base corresponde al antiguo alminar de la mezquita almohade, mientras que la parte superior fue realizada por Leonardo de Figueroa en el siglo XVIII.
Un tesoro artístico y cultural: Patrimonio de Sevilla
En su interior, la iglesia alberga un rico patrimonio artístico, incluyendo pinturas de la escuela sevillana del siglo XVII, esculturas y un retablo mayor de gran belleza. Además, cuenta con un pequeño museo donde se exponen diversas obras de arte.
Más allá de su valor histórico y artístico, la Iglesia Colegial del Divino Salvador sigue siendo un espacio de culto y cultura vivo. En ella se celebran misas, conciertos y otras actividades que la convierten en un referente cultural en el corazón de Sevilla.
La Iglesia Colegial del Divino Salvador es un símbolo de la Historia y la profunda identidad cultural de Sevilla. Su conservación y puesta en valor son esenciales para preservar este legado para las futuras generaciones.
Un exterior manierista y un interior barroco
La Iglesia Colegial del Divino Salvador, ubicada en la plaza del mismo nombre, sorprende por su fachada principal de estilo manierista, que contrasta con el interior barroco del templo. Esta fachada, construida a finales del siglo XIX, se aleja del proyecto original que incluía dos torres a cada lado.
En su interior, la iglesia se configura como un gran salón rectangular con pilares y columnas adosadas que sostienen bóvedas a gran altura. Esta característica la convierte en un templo único en la región. La cabecera de la nave central destaca por la tracería de las columnas, que incluye símbolos eucarísticos, castillos y leones, y por sus capiteles dorados.
La iglesia está coronada por una impresionante cúpula octogonal con tambor y linterna. La base de la cúpula cuenta con ventanales que permiten la entrada de luz natural.
Un rico patrimonio artístico: Retablos, esculturas y pinturas
El interior de la Iglesia Colegial del Divino Salvador alberga un rico patrimonio artístico, compuesto por 14 retablos, esculturas y pinturas de gran valor. Entre las obras más destacadas se encuentran:
Retablo mayor: Una obra barroca de Cayetano de Acosta (1770-1778) que representa la Transfiguración de Jesús.
Retablo del Cristo de los Afligidos: Una obra barroca de Gaspar Gines (1635) con una imagen del Cristo de los Afligidos del siglo XVII.
Retablo del Cristo del Amor: Ubicado en el testero colateral de la nave derecha, alberga una escultura del Cristo del Amor de Juan de Mesa (1620).
Retablo de la Virgen de las Aguas: Un retablo dorado del siglo XVIII que alberga la imagen de la Virgen de las Aguas, del siglo XIII. Esta virgen es considerada protectora de la ciudad y ha sido protagonista de rogativas en momentos de extrema gravedad.
Retablo portada de la capilla sacramental: Una obra rococó de Cayetano de Acosta (1756-1764) que guarda la imagen de Jesús de la Pasión de Juan Martínez Montañés (1615).
Retablo de la Virgen del Rocío: Un retablo del siglo XVIII que alberga una imagen de la Virgen del Rocío de Antonio Castillo Lastrucci.
La Iglesia Colegial del Divino Salvador es un tesoro arquitectónico y artístico que atesora siglos de historia y cultura. Su visita es una experiencia imprescindible para cualquier amante del arte y la historia que se encuentre en Sevilla.