Un pedazo de la Sevilla legendaria, la Venta de los Gatos, rescatada del olvido. El Ayuntamiento de Sevilla ha iniciado el proceso para adquirir este emblemático lugar, inmortalizado por Gustavo Adolfo Bécquer en su obra, y convertirlo en un centro cívico y cultural.
La operación de compraventa, valorada en 298.090,71 euros, se espera que se cierre próximamente. El objetivo es rehabilitar el inmueble, que se encuentra en un estado considerable de deterioro, y ponerlo en valor.
La Venta de los Gatos, ubicada en las barriadas de El Cerezo, Macarena Tres Huertas y Las Avenidas, cubrirá una importante demanda de equipamientos culturales en la zona. Su uso como centro cívico es compatible con la calificación actual del suelo.
Un espacio para la memoria y la cultura
La recuperación de la Venta de los Gatos no solo revalorizará este lugar histórico, sino que también creará un espacio para la memoria de Bécquer y para la promoción cultural.
El proyecto cuenta con un presupuesto dentro del programa de inversiones del plan de enajenaciones e inversiones para el periodo 2020-2025. Tanto el propietario del inmueble como el Ayuntamiento han mostrado su disposición a llevar a cabo la operación.
Un nuevo capítulo para la Venta de los Gatos
Este emblemático lugar, que ha pasado por momentos de abandono, está a punto de iniciar un nuevo capítulo. Su transformación en centro cultural lo convertirá en un espacio de encuentro para la comunidad y un homenaje a la obra de Bécquer.
La Venta de los Gatos: un oasis de Bécquer en la Sevilla moderna
Sevilla guarda en su memoria diversos lugares relacionados con Bécquer, pero la Venta de los Gatos se alza como un testigo único de su época. Situada en la Macarena, lo que en el siglo XIX era un lugar de paso camino de San Jerónimo, hoy nos regala un oasis de historia y poesía en medio de la ciudad moderna.
Las páginas de Bécquer la inmortalizaron en sus crónicas de 1862, evocando la alegría que reinaba en sus rincones. Sin embargo, la inauguración del cementerio de San Fernando en 1853 marcó un cambio en su atmósfera.
Su importancia se remonta a siglos atrás, formando parte de los bienes del convento de Santa Clara en el siglo XVIII. A lo largo de los años, numerosas figuras han luchado por conservarla, intentando preservar el espíritu y la leyenda del poeta sevillano.
La Venta de los Gatos ha sido testigo de la historia de la ciudad. Mencionada en textos sobre la Guerra de la Independencia, se describe como una casita blanca con techos rojizos y verdes, que ha pasado por diversas manos a lo largo de su historia. Incluso llegó a albergar una empresa de mármoles en 1928.
Los hermanos Álvarez Quintero la recordaban con una placa en honor a Bécquer, colocada gracias a una iniciativa popular. Su último uso fue como salón de celebraciones, pero su esencia poética permanece intacta.
Más que un lugar, la Venta de los Gatos es un viaje en el tiempo a la Sevilla de Bécquer. Un refugio donde la memoria del poeta se funde con la historia de la ciudad, un legado invaluable que debemos proteger.
