El monumento de Sevilla que celebra la primera Circunnavegación

La obra, realizada por el escultor y pintor Antonio Cano, fue concluida en 1973, marcando un punto de inflexión en la vida del artista, que a los 65 años decidió centrarse exclusivamente en la pintura

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Fuente conmemorativa de la Circunnavegación.
Fuente de Elcano-Magallanes en Sevilla.

El monumento en honor a Juan Sebastián de Elcano, que rememora el primer viaje alrededor del mundo, fue encargado por el Ayuntamiento de Sevilla en 1963 mediante un concurso público. La obra, realizada por el escultor y pintor Antonio Cano, fue concluida en 1973, marcando un punto de inflexión en la vida del artista, que a los 65 años decidió centrarse exclusivamente en la pintura. El monumento se alza como testimonio de la hazaña marítima que cambió la historia de la exploración.

La estructura se compone de tres partes que combinan simbología y arte para rendir homenaje a la gesta de la circunnavegación. Un estanque con surtidores de agua evoca el océano que los navegantes atravesaron durante la expedición, mientras que un mural con un mapamundi destaca la magnitud del viaje. En el centro del conjunto, la estatua de Juan Sebastián de Elcano se erige como un homenaje al navegante que completó la vuelta al mundo tras la muerte de Fernando de Magallanes.

A la derecha, una imponente columna añade un elemento narrativo a la composición, dividiéndose en cuatro niveles de bajorrelieves que representan episodios cruciales de la travesía. Cada nivel está compuesto por diez figuras, lo que permite una interpretación detallada de los acontecimientos más importantes del viaje.

Diferentes niveles

Primer nivel: La partida desde Sevilla

El nivel inicial de la columna representa el momento en que la expedición zarpó desde Sevilla en 1519. Las figuras esculpidas muestran la preparación y la despedida de los hombres que, a bordo de cinco barcos, emprendieron una aventura sin precedentes con la ambición de circunnavegar el globo. El relieve plasma la intensidad de la partida, destacando el entusiasmo y la incertidumbre que envolvía a los marineros y sus familiares.

Segundo nivel: Encuentros y contacto con los pueblos indígenas

En el siguiente nivel, se relatan las primeras interacciones de la expedición con los pueblos que encontraron a lo largo de su ruta. Las figuras muestran escenas de intercambio cultural, comercio y negociaciones, a la vez que reflejan la variedad y complejidad de las sociedades con las que los exploradores se encontraron. El relieve también sugiere las dificultades derivadas de las diferencias lingüísticas y culturales, que añadían un componente impredecible a la travesía.

Tercer nivel: Conflictos y la muerte de Magallanes

El tercer nivel introduce un tono más dramático, representando los momentos de conflicto que surgieron durante el viaje. Las figuras aquí son más dinámicas, capturando escenas de lucha con algunas comunidades locales, lo que subraya los riesgos y peligros inherentes a la empresa. Entre los episodios esculpidos destaca la muerte de Fernando de Magallanes en 1521, en la isla de Mactán, Filipinas, un punto crucial que dejó a la expedición sin su líder inicial y obligó a Juan Sebastián de Elcano a tomar el mando.

Cuarto nivel: El regreso triunfal y el agradecimiento en Sevilla

El nivel superior conmemora el regreso de los supervivientes a Sevilla en 1522, después de casi tres años de viaje. La llegada se representa como un momento de gloria y alivio, con escenas que muestran a los marineros en actitud de agradecimiento. Una figura central rinde homenaje a la visita de los navegantes a la Virgen de la Antigua, en la Catedral de Sevilla, donde dieron gracias por haber superado todos los desafíos del viaje y sobrevivido para contar la historia.

La columna culmina con una Rosa de los Vientos, un símbolo que encapsula el espíritu explorador de la expedición y la navegación. Esta imagen alude a la orientación y a la búsqueda de lo desconocido, que motivó a los hombres de la época a emprender estas arriesgadas travesías.

Situado en la Glorieta de los Marineros, en el Parque de María Luisa, el monumento se encuentra en un entorno histórico y culturalmente significativo de Sevilla. Muy cerca, se halla el Costurero de la Reina, un edificio emblemático que actualmente sirve como Oficina de Información Turística, lo que convierte al área en un punto de interés tanto para los turistas como para los amantes de la historia.

Un tributo a la circunnavegación

Este monumento celebra una proeza realizada por 250 hombres que, capitaneados inicialmente por Fernando de Magallanes, partieron de Sevilla con la misión de demostrar que el mundo era redondo. A pesar de las pérdidas sufridas, la expedición logró lo imposible bajo el liderazgo de Elcano, consolidando a Sevilla como una ciudad clave en la historia de la navegación mundial y transformando nuestra comprensión del mundo para siempre.